El ataque de Rusia a Ucrania tiene en vilo a toda la población. Las dudas sobre qué pasará en las próximas horas, días, no cesan, ni tampoco sus efectos. Aunque el Kremlin ya ha dejado entrever por dónde irán sus represalias frente a Europa si interviene: recortando el suministro de gas, que supone el 40% del abastecimiento europeo. Una respuesta que afecta de lleno al sector del taxi en Mallorca, que sigue con “miedo” y “preocupación” el conflicto bélico. “Si suben los precios del combustible y el gas la situación será insostenible”, confiesa Gabriel Moragues, presidente de la Asociación de Autónomos del Taxi.
Y es que para el dirigente de esta entidad, que representa a dos tercios del sector, las consecuencias no solo pasan por el encarecimiento del coste del gas, sino también del combustible, “de modo que nos afecta a todos”. Unos efectos que, en palabras de Moragues, pueden ser “catastróficos” ya que se unirían a los dos años infernales que ha vivido el sector con la pandemia de la covid-19. Por ello, reclama al Gobierno central que “no nos dejen solos” y les den ayudas, “pero ayudas de verdad”. “Necesitamos que nos den algún tipo de subvención porque sino el aumento de costes repercutirá en los ciudadanos, como siempre”, advierte Moragues. Es decir, subirían las tarifas, que llevan congeladas -según el presidente de la Asociación de Autónomos del Taxi- tres años.
En la misma línea se pronuncia Antoni Bauzá, presidente del colectivo de taxistas asociado a la patronal CAEB, quien insta a frenar “esta barbarie” antes de que sea tarde. Para ello, dice, debe haber una respuesta coordinada entre las distintas instituciones -“llámense OTAN, Unión Europea,…”, puntualiza- para que el conflicto no vaya a más porque sino “los taxistas serán solo uno más de los miles de afectados”.
Tanto Moragues como Bauzá hablan del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania sin apartar la mirada de la temporada turística que está a punto de arrancar en la isla. “Estamos muy preocupados y expectantes por ver qué pasará y cómo afectará este ataque a la temporada turística”, sostiene Moragues, al tiempo que asegura que las expectativas eran “muy buenas” hasta ahora. Según el presidente de la Asociación de Autónomos del Taxi, parecía que iban a pasar más pasajeros que nunca por el aeropuerto de Palma y había ganas de viajar y disfrutar después de dos años de pandemia. “Ahora no hay nada claro”, señala.
Por ello, Bauzá pide “cordura” y que "no se tiren más bombas” ya que esta situación lleva a los trabajadores a volver a estar en una tesitura “insostenible”. Como argüían anteriormente, las consecuencias económicas del coronavirus estos dos últimos años han dejado muy tocado al sector, que continúa cada día sorteando obstáculos como la constante subida del precio del combustible. “Es preocupante pensar cómo nos afectará todo este conflicto a nosotros, aunque a nivel político la línea expansionista de Rusia lo es aún más. Si Occidente no actúa con contundencia puede que China vea el camino abierto y mañana ataque algún país. Es algo muy delicado que hay que poner remedio ya”, defiende Moragues.
