La Fundación Escola Catòlica manifestó ayer una «profunda decepción» con el texto final de la nueva Ley de Educación de Balears, aprobada este martes en el Parlament. 

La presidenta de la entidad, Llúcia Salleras, cargó contra la Conselleria por «no respetar el Pacto Educativo, alcanzado por la inmensa mayoría del sector». Según la responsable, la legislación entrante incumple el acuerdo respecto a la complementariedad entre los colegios públicos y concertados, la autonomía de centros y el respeto a la voluntad de las familias, así como lo referente a la oferta lingüística.

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«Por lo visto, han prevalecido los compromisos con los socios de gobierno por encima de la voluntad de hacer una ley perdurable y de todos», expresó la responsable.

Con todo, la líder acusó al Govern de favorecer «de forma indisimulada» a la escuela pública en detrimento de la concertada, que, aún así, zanjó Salleras, «seguirá siendo el principal referente de calidad del sistema educativo».