La Conselleria de Educación y Formación Profesional informó ayer que actualmente hay 610 docentes de baja en los centros educativos públicos de Balears. De ellos, 433 están en Mallorca, 37 en Menorca, 134 en Ibiza y seis en Formentera.

Según el Govern, esta cifra supone el 3,8 por ciento del profesorado de los centros públicos (sobre un total de 16.000).

Con todo, la cifra de profesores que están de baja por el virus se ha duplicado en solo dos semanas, pues el pasado 10 de enero, el día de la vuelta a clase después de las vacaciones de Navidad, Educación notificó unos 300 docentes en situación de incapacidad temporal por covid, es decir, el 1,87% del total de profesorado de centros públicos.

Ese mismo día se anunció el último incremento del servicio de sustituciones exprés, que aumentó en 20 maestros. De esta manera, la bolsa docente está integrada ahora por 80 profesores, con el objetivo de que los alumnos no pierdan horas de clase ante el aluvión de bajas laborales. Con estas cifras, al inicio de curso Educación aseguró que el número de trabajadores iría aumentando para atender las necesidades de los colegios.

4.555 estudiantes contagiados

Por otro lado, según datos aportados por la conselleria de Salud ayer, los positivos acumulados en los últimos siete días entre la población de 3 a 16 años suponen un total de 4.555, de los que 3.457 son en Mallorca, 444 en Menorca, 613 en Ibiza y 41 en Formentera. Esta cantidad supone el 3,5% del alumnado (sobre un total de 129.884 estudiantes).

Finalmente, los centros educativos comunicaron un total de 96 grupos en cuarentena, de los cuales 83 están en centros de Mallorca, ocho en Menorca, cuatro en Ibiza y uno en Formentera.

A nivel nacional, en la última semana la sexta ola ha multiplicado por 16 el número de aulas confinadas por casos de covid, hasta llegar al 0,5% del total. Respec to al número de docentes de baja por la enfermedad, ayer España se contabilizaron un total de 24.742.

Salud relativiza el impacto de las mascarillas en los niños

La conselleria de Salud relativizó ayer el impacto de las mascarillas en los niños, frente a los pediatras y logopedas de Balears que han observado un retraso en la interacción, socialización y adquisición del lenguaje en los más pequeños a causa del tapabocas y las restricciones. La directora asistencial del IB-Salut, Eugenia Carandell, manifestó respecto a estas informaciones que se trata de «una secuela de tantas que están sufriendo los niños», y consideró que las secuelas de la pandemia deben valorarse «de manera más conjunta». Respecto al uso de la mascarilla en espacios exteriores, la directora consideró que «todavía tiene sentido en ciudades grandes», mientras que lo pierde en lugares poco concurridos. En esta línea, la responsable confió en que la norma se irá relajando a medida que la sexta ola aminore el ritmo de contagios, aunque evitó hacer predicciones sobre la fecha aproximada en la que el uso del tapabocas dejará de ser obligatorio.