El expresidente de la Federación Balear de Tenis Jaime Amengual y el gerente Luciano Gutiérrez se sentaron ayer en el banquillo de los acusados de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma. El fiscal pide para cada uno de ellos cuatro años de prisión por los presuntos delitos de apropiación indebida y administración desleal. Al no alcanzar las partes ningún acuerdo de conformidad en la vista previa, el juicio quedó señalado para los próximos 7 y 8 de junio.

De acuerdo con el escrito de acusación del fiscal, el expresidente de la Federación Balear de Tenis Jaime Amengual Oliver, que ostentó el cargo desde 2001 a 2012, cambió el funcionamiento de la entidad. La gestión de la junta directiva pasó a ser unipersonal.

Una de sus primeras decisiones fue contratar como gerente a Luciano Gutiérrez. A partir de su nombramiento, los contratos de la Federación Balear de Tenis pasaron a realizarse con la sociedad Gutysport Costa de Calvià, SL. Esta mercantil estaba vinculada al directivo. La acusación cree que el presidente sabía que Gutiérrez era el propietario de la mayor parte de aquella empresa, a pesar de que formalmente figuraba como administradora su esposa.

El abono de las dietas inicialmente se incluyeron en la nómina del gerente. Pasado el tiempo se abonaban como «dietas varias» fuera de nómina y sin la debida justificación, precisa el fiscal. Por este concepto se reclama que indemnicen a la Federación Balear de Tenis con la suma de 30.715, 52 euros.

En este sentido, el ministerio público también reclama que los dos exdirectivos indemnicen a la entidad de tenis balear con 8.000 euros correspondientes a un pagaré extendido al gerente. Tampoco en este caso existía justificación.

La cantidad más abultada que reclama la Fiscalía a los dos exdirectivos del tenis balear asciende a 76.984,49 euros pagados a la sociedad Gutysport Costa de Calvià SL, vinculada al gerente. El fiscal considera que los pagos que allí aparecen no estaban acreditados.

La Fiscalía también ve indicios de delito en un convenio de colaboración entre la Federación y la empresa del gerente, por el cual la primera pagaba 6.000 euros y la otra cedía el uso de unas pistas de tenis. Según el fiscal, no se ofreció realizar este convenio con ningún otro club. Además, destaca que se trataba de unas pistas cuya explotación tenía concedida la empresa por adjudicación del Ayuntamiento de Calvià.

Durante la vigencia del convenio se presentaron por parte de la empresa a la Federación numerosas facturas referentes a competiciones, infraestructuras, árbitros, fisioterapeutas y dirección de torneos sin que consten los justificantes acreditativos de pagos a terceros.