Pere Soler y Bel Febrer, expulsado de El Pi el primero y suspendida de militancia dos años la segunda, han valorado hoy la dura resolución del comité de disciplina del partido regionalista. Según Soler, "Nos expulsan con argumentos débiles que juzgan supuestas intenciones en vez de hechos y en base a los criterios políticos de solo una parte del partido". Soler dejó claro que de ninguna de las maneras dejarán las dos actas de consellers del Consell de Mallorca y será la institución insular la que decidirá de qué forma queda el grupo de consellers de El Pi.

Soler, que es el actual portavoz de El Pi en el Consell de Mallorca, y Febrer, consellera insular de los regionalistas, han comparecido en la sede de El PI de Inca, ya que en otra ocasión el partido ya les habían denegado la entrada en la sede de Palma. "Se trata de una decisión basada en criterios políticos de una parte de El Pi, las decisiones siempre se han tomado de forma unilateral, teniendo en cuenta los intereses de una parte del partido.” Tanto Febrer como Soler han manifestado también que “no es una decisión ética y acude a fuentes externas no competentes”. Desde el congreso las cosas no se han hecho de acuerdo a los estatutos. El presidente (en alusión a Tolo Gili) nunca ha querido acercar posiciones ni llegar a acuerdos con parte del partido.”

Los hechos se remontan a principios de noviembre, cuando Soler y Febrer decidieron cambiar el portavoz del Consell, que era Xisca Mora por designación del partido y del sector 'melianista' que había ganado el congreso. Soler y Febrer pertenecían a la otra candidatura que perdió y denunció presuntas irregularidades durante el proceso congresual ante la Oficina Anticorrupción El argumento de Soler y Febrer para derrocar a la portavoz oficial fue que Mora quería contratar un asesor para el Consell pero que trabajase para el partido, pero ellos querían un asesor de comunicación que se dedicara por completo al Consell.

La resolución del comité de disciplina les acusa de una desobediencia muy grave, que en el caso de Soler señalan que "ha perjudicado seriamente al partido". Por ello expulsan al portavoz y solo suspenden de militancia durante dos años a la consellera Febrer. La escisión está cantada y ya se han marchado militantes de Eivissa y, según Soler, en el comité de Inca y de otros municipios habrá importantes bajas tras esta resolución.

Soler ha anunciado hoy que tienen 15 días para presentar un recurso de alzada ante los órganos del partido y, en caso de que no les den la razón, acudirán a los tribunales de Justicia. "Nuestras alegaciones estaban basadas en jurisprudencia sobre conflictos entre partidos, en los estatutos y en el reglamento del Consell, por consiguiente consideramos que tenemos razón ante los argumentos débiles que han utilizado para expulsarnos", ha apostillado Soler.