La predicción de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de que más de la mitad de la población de Europa se infectará por la contagiosa variante ómicron en las próximas seis u ocho semanas es perfectamente aplicable a Baleares.
El jefe del servicio de Microbiología de Son Espases, Antonio Oliver, ha señalado que, al ritmo de contagios actuales, «probablemente será así».
Sustenta su apreciación en que si la nueva variante del SARS-CoV-2 circulaba al 85% la semana pasada, en las secuenciaciones genómicas realizadas en esta el porcentaje se ha incrementado hasta el 90%, nueve de cada diez nuevos contagios los provoca ómicron.
«Así que adelantar que el 50% de la población de las Islas se habrá contagiado con esta variante en los próximos dos meses no es ninguna locura, no es descabellado», reitera.
Se apoya además Antonio Oliver en las cifras de las últimas jornadas y revela que tan solo con las pruebas PCR del laboratorio de Son Espases unidas a los test de antígenos del área de salud de Ponent del que el hospital es el centro de referencia, están comunicando una media de 3.000 casos positivos nuevos cada jornada.
«Cuando se empiecen a contabilizar los test de antígenos de las farmacias no tengo ninguna duda de que rebasaremos los diez mil casos diarios, casi un 1% de la población del archipiélago», contabiliza el jefe de Microbiología calculando que, a ese ritmo, podrían contagiarse unas 300.000 personas al mes y la mitad de la población insular en tan solo dos mensualidades. Las cuentas cuadran, siempre que el número de nuevos contagios se mantenga a este ritmo.
Inaguantable para el sistema
Que no sería lo deseable por dos cuestiones. La primera de ellas es que el elevado número de contagios puede llegar a colapsar el sistema sanitario en el momento en que las en principio infecciones leves o asintomáticas comiencen a complicarse y requieran de una asistencia sanitaria. «Si el 50% de la población de Baleares se contagiará de golpe o de una manera muy acelerada, estaríamos ante un escenario completamente inaguantable para el sistema sanitario», advierte el microbiólogo.
Por eso previene contra las voces que proclaman que no se debería hacer nada para conseguir una inmunidad natural de la mano de contagios masivos de la población. «Intentar acelerar el número de contagios para conseguir la inmunización natural de todo el mundo sería una auténtica locura», previene.
Una nueva mutación
Porque aquí entra el segundo potencial peligro de estas infecciones masivas. Y es que Oliver revela que «cuantos más casos diarios haya y más circule el virus, más posibilidades hay de que surja una nueva mutación».
Respecto a la situación actual {ayer Salud informó de que, a fecha del pasado lunes, ya había 160.759 baleares que han pasado la enfermedad en alguna de las seis olas que han sobrevenido hasta el momento}, el jefe del laboratorio de Microbiología sostiene que entre 60.000 y 70.000 se han infectado en esta sexta ola.
«Todo lo que pasa de los cien mil contagios corresponden a esta sexta ola, entre el 5% y el 10% de la población de las Islas se ha contagiado con ómicron en esta sexta ola», calcula Antonio Oliver. Para concluir, el microbiólogo considera que lo deseable es que el número de nuevos contagios vayan sumándose de una manera progresiva, sin poner en peligro un ya precario equilibrio asistencial. «Con un importante número de personas contagiadas, el virus se autolimitará y bajará su difusión», anticipa lo que puede ser el principio del final de esta pesadilla.
