Baleares cerró el pasado mes de diciembre con la cifra de trabajadores de alta en la Seguridad Social más alta de su historia en esa época del año: 440.608. Ese número no solo supone un incremento del 5,5% respecto al cierre de 2020, sino que incluso deja atrás la cifra de finales de 2019, cuando se contabilizaron 435.779 puestos de trabajo. Algo muy similar sucede con el paro. Diciembre concluyó con 55.974 desempleados, la cifra más baja en esas fechas de la última década, y que supone una reducción del 33,6% respecto al ejercicio anterior.
Con estos datos, el conseller de Trabajo y Turismo, Iago Negueruela, hizo gala de la fortaleza de la recuperación de la economía balear y de las políticas de protección que se han impulsado durante la pandemia, y rechazó los mensajes catastrofistas que se lanzan desde algunos grupos políticos de la oposición. Además, puso en valor el trabajo realizado desde la Mesa del Diálogo Social, de la que forman parte patronales y sindicatos, a la hora de acordar las estrategias a aplicar para hacer frente a la covid.
Por lo que respecta al empleo existente en las islas, tanto el conseller como el director general de Modelo Económico, Llorenç Pou, pusieron de relieve que la citada cifra de 440.608 afiliados a la Seguridad Social supone un máximo histórico en un mes de diciembre, lo que implica además que la reactivación económica de las islas no se limita al periodo de la temporada turística, sino que se extiende a uno de los meses de menor actividad económica en el archipiélago. Este último punto explica que si se compara ese número con el de noviembre, se detecte una bajada del empleo del 3,3%.
Respecto a la comparación interanual, el incremento balear del 5,5% es el segundo más importante del país, solo superado por el 6,4% de Canarias, y queda claramente por encima de la media estatal, donde esa subida ha sido del 4,1%.
Un aspecto destacado especialmente por Negueruela y Pou es que ese crecimiento del empleo balear ha alcanzado a todos sus sectores, aunque ha sido especialmente intenso en la rama de la hostelería, con un 14,6%. También se puede señalar el caso de la construcción, con un 4,8%, o del comercio, con un 4,1%.
En este aspecto, el conseller indicó que aunque se mantienen muchas incertidumbres en relación a la pandemia, las empresas han contratado más porque se ha registrado más actividad. Sobre este punto, recordó además la cifra récord de ahorro que se ha conseguido en las islas a lo largo de este periodo.
Otro dato a tener en cuenta es la reducción que se ha registrado en el número de trabajadores que siguen dentro de un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que en diciembre fue de 5.955, lejos ya de los más de 150.000 de mayo de 2020.
Por lo que respecta al desempleo, los 55.974 parados de diciembre muestran el recorte interanual más notable del país, ya que el descenso del 33,6% no tiene parangón en ninguna otra autonomía y mejora sustancialmente la media española, donde esa bajada ha sido del 20,1%. También implica un descenso del 3% en relación a noviembre.
La cifra de trabajadores de las islas afectados por un ERTE se ha reducido hasta situarse en los 5.955
Eso deja la tasa de paro administrativo del archipiélago en un 11,3%, la más baja de la historia en un mes de diciembre.
Como en la creación de empleo, el recorte del paro respecto al pasado año se ha dado en todos los sectores, con bajadas del 36,1% en el comercio, del 35,9% en la construcción, o del 33,3% en la hostelería.
En este apartado, hay que poner de relieve la fuerte reducción que se ha registrado en el desempleo juvenil, dado que entre los menores de 25 años esta bajada ha sido de un 57,9%.
Por otro lado, un 64,6% de los demandantes de empleo está recibiendo algún tipo de ayuda.
Como balance del conjunto de 2021, el conseller y el director general destacaron dos fases, con un primer semestre todavía con fuertes restricciones, que fue seguido de una segunda parte del año con la recuperación de la actividad turística y una intensa reactivación económica.
De cara al presente ejercicio, Iago Negueruela se declaró partidario de elevar el salario mínimo interprofesional para que alcance los 1.000 euros mensuales, aunque recordó que este punto debe de negociarse con los agentes sociales.
Además, pronostico una bajada de la temporalidad a lo largo del presente ejercicio gracias a la reforma laboral que el actual Gobierno de Pedro Sánchez ha acordado con las patronales y los sindicatos.
Por su parte, las patronales CAEB y PIMEM han puesto en valor la recuperación económica que se está registrando en las islas, como se refleja en la evolución de su mercado laboral, pero con la advertencia de que ésta no está todavía consolidada.
La presidenta de la primera de estas organizaciones, Carmen Planas, no ha ocultado que la recuperación del empleo ha sido «intensa», pero ha pedido que no se tomen medidas que puedan desincentivar la buena evolución de la economía.
Su homólogo en PIMEM, Jordi Mora, también ha destacado el carácter positivo de los datos del empleo, y ha expresado su confianza en que esta tendencia se va a mantener a lo largo de 2022, al disponer ya de la ayuda de los fondos europeos.
La secretaria de Acción Sindical de UGT en las islas, Ana Landero, también ha subrayado la recuperación balear, pese a lamentar que el peso de la contratación temporal sigue siendo excesivo.
Sobre este último punto ha insistido la secretaria de Empleo de CC OO en el archipiélago, Yolanda Calvo, ya que aunque se señalan las mejoras que se están registrando en el mercado laboral, se lamenta que éstas aparecen vinculadas a la precariedad. Por ello, desde este sindicato se señala la esperanza de que esta situación cambie con la nueva reforma laboral.
