El Departamento de Movilidad e Infraestructuras del Consell de Mallorca empezará en los próximos días un plan de reforestación y revegetación en las carreteras de la isla. Para ello, se plantarán unos 600 árboles que cubrirán una superficie aproximada de 70.000 metros cuadrados. La inversión será de unos 60.000 euros ya que el gasto es de 0,85 céntimos por metro cuadrado.

Se llevarán a cabo treinta y siete actuaciones en diferentes espacios y utilizarán especies autóctonas seleccionadas según los criterios de idoneidad propuestos por el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEDEA). Desde la conselleria calculan que los trabajos durarán hasta marzo de 2022.

Sevillano explicó que, históricamente, Mallorca ha tenido muchos espacios que no se han aprovechado, por lo que esta es una oportunidad para «gestionarlos de otra manera». Además, defiende que «no solo construimos carreteras, sino que también tenemos sensibilidad ecológica». 

Los objetivos principales son: revegetación de espacios, protección del suelo con vegetación, reducción de la huella de carbono, reducir los niveles sonoros y mejorar el entorno visual a través de la integración paisajística.

Las acciones se llevarán a cabo en zonas de Palma, Calvià, Sóller, Santa Maria, Binissalem, Marratxí, Bunyola y Pollença. 

Esta actuación de reforestación coincide con el año en que se cumple el décimo cumpleaños de la declaración de la UNESCO de la sierra de Tramontana Patrimonio Mundial en la categoría de paisaje cultural. Por ello, afirman, supone «el reconocimiento internacional al equilibrio durante siglos entre la acción del ser humano y la naturaleza, con el resultado que todos conocemos. Queremos poner nuestro granito de arena para transformar la isla».