El pasado jueves 25 de noviembre cayeron los primeros copos de nieve del otoño en Mallorca.

El Puig Major se tiñó de blanco, la primera nevada desde 2019 en un mes de noviembre, debido a la DANA que ha estado afectando a la isla esta semana con fuertes lluvias y bajas temperaturas.

Esta pequeña nevada, que se debió a un chorro de aire polar, registró una mínima de 1,7 grados en la Serra d’Alfàbia, en Bunyola y se mantuvo durante toda la jornada.

Este evento meteorológico podría volver a repetirse en el día de hoy, ya que se mantiene la cota de nieve a 1.200 metros, aunque bajará hasta 800 el domingo.

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Primeras nieves en la Serra Lorenzo Adrover

Aún quedan meses de bajas temperaturas para ver cómo se desarrollan las siguientes nevadas pero, por el momento, podemos recordar las cuatro más importantes en los últimos 70 años en Mallorca:

Siete días de nieve en 1956

Entre el 2 y el 20 de febrero de 1956 se registraron en Mallorca fuertes nevadas que afectaron a toda la isla. Según la delegada de la Agencia Estatal de Metereología (Aemet) en Baleares, María José Guerrero, que habló con el Diario de Mallorca el año pasado, su repercusión fue mayor en la Serra, el norte y el este de la isla. También nevó en Menorca, Eivissa y Formentera, donde el fenómeno es más raro ya que no tienen cotas muy altas".

Ese año se bautizó como s'Any de sa neu por ser uno de los más gélidos ya que nevó en todos los municipios de de la isla, registrando temperaturas de hasta 13,5 bajo cero en Lluc, además de capas de nieve de hasta 60 centímetros.

Según explicó, estas "estuvieron provocadas por una masa de aire siberiano muy frío (...) que provocó tres episodios: nevó los días 2 y 3, el 10, el 11 y el 12 y el 19 y el 20. En total, 7 días de precipitaciones. En la Serra se llegaron a acumular entre 50 y 60 centímetros de nieve, en Pollença el grosor del manto fue de 15 centímetros y en Palma se registraron hasta 5 centímetros".

Lluc fue uno de los municipios más afectados, como suele ser habitual y es que el manto de nieve cubrió el suelo durante 14 días y el 12 de febrero se alcanzó una temperatura mínima de -13,5 grados, la más baja registrada en 1942.

"Ese mismo día, muy gélido, el termómetro marcó menos 10 grados en Son Sant Joan, 8 bajo cero en Son Bonet y menos 3,5 en el centro de Palma". Las bajas temperaturas que se registraron durante ese periodo provocaron que la nieve no se derritiese a la velocidad habitual y municipios como Artà, Alcúdia, Sant Joan o Palma pudieran disfrutar de la nieve durante más de una semana.

Capdepera en la gran nevada de 1956

La segunda gran nevada, en 2012

Las nevadas del 4 y 5 de febrero de 2012 suponen para Guerrero, las segundas más importantes ya que "nevó en bastantes municipios de Mallorca con un espesor bastante significativo. No solo nevó en la Serra, sino también en el sur de la isla, desde Calvià a Palma. En Portopí se acumularon 1,5 centímetros de nieve y 6 en sa Cabaneta".

La Serra amaneció con un espectacular manto blanco de nieve que, en enclaves como el monasterio de Lluc, llegó a los 30 centímetros de espesor. En Palma, a las nueve de la mañana, se registraron hasta siete centímetros de nieve en sus puntos más elevados. En otras zonas, como el Paseo Marítimo, el espesor de la nevada no superó los tres centímetros.

Este acontecimiento meteorológico sucedió a causa de una ola de frío que llevó la nieve al nivel de mar en Palma, dejando completamente blanco el fondo de la Catedral con la Serra de Tramuntana nevada. En cuanto a las temperaturas, en Lluc se registraron temperaturas de 3 grados bajo cero y en Palma 1 grado negativo. 

4 y 5 de febrero de 2012

La tercera más importante fue en 2005

Si hablamos de la tercera nevada más relevante, tenemos que retroceder a 2005. "Las precipitaciones se produjeron del 25 al 26 de enero y fueron significativas porque se produjeron a nivel de mar. Las playas y las calles amanecieron blancas.

En el Puig Major la nieve alcanzó un espesor de un metro, de 30 centímetros en Cúber y en Palma se registró una temperatura de menos tres grados", recuerda Guerrero.

Por otro lado, las lluvias sobre la capital llegaron a alcanzar los nueve litros por metro cuadrado y vientos de más de 65 kilómetros por hora en algunos momentos de la jornada.

Este fenómeno se produjo en otros muchos puntos al nivel del mar, según se señaló desde el Centro Meteorológico de Balears. La nevada alcanzó un metro de espesor en el Puig Major y se formaron placas de hielo en algunas carreteras.

La playa de Portocristo nevada en 2005 MIQUEL NICOLAU DURAN

Cuarta nevada en 1985

En cuarto y último lugar, sitúa la delegada, la nevada de enero de 1985. En este caso, nevó en Palma durante dos días consecutivos aunque no cuajó pero sí lo hizo en Escorca, en las estribaciones de la Serra en el término de Pollença y en Fornalutx, entre otros puntos.