La Policía Nacional y la Guardia Civil ya han conseguido localizar y arrestar a doce de los 23 pasajeros que se dieron a la fuga de un avión en el aeropuerto de Palma al filo de las siete de la tarde de ayer. Once de ellos han sido localizados en el municipio de Marratxí, en las proximidades de sa Cabaneta. El otro es el pasajero que fingió estar enfermo y fue detenido en Son Llàtzer al comprobar que estaba bien de salud. 

La llamada de un vecino de Marratxí fue clave para localizar a varios de los fugados del avión de Son Sant Joan. El aviso permitió a la Policía la detención de cinco sospechosos que deambulaban por sa Cabaneta, uno de ellos en la zona de es Figueral,  poco después de que consiguieran salir del aeropuerto. El goteo de arrestos se ha mantenido durante la mañana de hoy hasta alcanzar la docena.

El avión de la compañía Air Arabia Maroc cubría la ruta Casablanca-Estabul y aterrizó de emergencia en el aeropuerto de Son Sant Joan después de que un pasajero notificara que se encontraba mal. Cuando los servicios médicos entraron en el avión para atender al supuesto enfermo, una veintena de personas aprovecharon para huir a través de las pistas del aeródromo.Este incidente obligó a cerrar el aeropuerto durante varias horas. Se cancelaron 47 y tuvieron que desviarse otros trece: cinco a Barcelona, cuatro a Eivissa, dos a Maó, uno a Madrid y otro a Valencia. Son Sant Joan volvió a reabrirse al tráfico aéreo poco después de la medianoche.

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La delegada del Gobierno, Aina Calvo, ha asegurado hoy que la fuga masiva de pasajeros en el aeropuerto de Palma  podría haber sido improvisada tras el aterrizaje de emergencia en Mallorca, aunque ha admitido. Calvo ha explicado que la Policía y la Guardia Civil no tienen "datos" que permitan afirmar que se trata de un "acto orquestado, planificado o diseñado con anterioridad", aunque ha precisado que esta hipótesis no está descartada.