Unos 180 baleares con VIH y sus familias reciben apoyo social y psicológico cada año de la Asociación de Lucha Anti-Sida de las Illes Balears, ALAS, por medio de su programa integral, financiado por el IRPF Social de la Conselleria de Asuntos Sociales.

El coordinador de ALAS, Joan Viver, ha explicado que la ayuda directa apoya a 180 persona pero «tiene una repercusión en su entorno más cercano» de manera que los beneficiarios son más personas, informó la Conselleria este lunes en una nota. ALAS da apoyo social y psicológico tanto a portadores de VIH como a su entorno más cercano por medio de una trabajadora social y dos psicólogas, con actividades de socialización y con sesiones formativas como el programa PARES, con el que reciben apoyo por parte de pacientes expertos, que supone «un trato de tú a tú entre iguales», apunta Viver.

Una usuaria, que contrajo el virus hace 27 años, asegura que a día de hoy «todavía hay un estigma fuerte, en gran parte por falta de información de la población», e insiste en que «el problema del VIH ahora no es médico, es un problema social». «Entre la asociación, los medios de comunicación y todos tendríamos que ir mejorando», alega.