Un juzgado de Palma ha archivado la causa contra el acusado de contagiar a 22 personas en Manacor. El juez ha concluido que desconocía que era positivo.

El sospechoso fue despedido del Forn Can Tòfol, donde trabajó 14 años. Acudió a trabajar y al gimnasio pese a tener evidentes síntomas de la covid, como tos y 40 grados de fiebre. Sus compañeros, muy alarmados, le pidieron que se marchara a casa, pero no lo hizo, ni siquiera después de someterse a una prueba PCR. Cuando se supo que había dado positivo, sus compañeros tuvieron que hacerse también el test. Cinco de ellos dieron también positivo y otros tres en el gimnasio, y a su vez lo transmitieron a sus familiares. En total, 22 contagios, incluidos tres bebés de un año. El establecimiento tuvo que cerrar a consecuencia del macrobrote.

El hombre fue detenido esa misma semana acusado de un delito de lesiones.