El Govern ha reclamado al Gobierno central una mayor dotación de efectivos para hacer frente a la llegada masiva de pateras con migrantes procedentes del norte de África. La presidenta del Govern, Francina Armengol, a preguntas del PP y de Vox y al día siguiente del naufragio de 17 personas junto a Cabrera, aseguró ayer en el Parlament que piden al Estado una mayor dotación de agentes de la Policía Nacional especialistas en inmigración, así como más recursos para impulsar políticas humanitarias y poder atender a de forma digna a los migrantes.

Armengol apuntó que «en 2020 se triplicó el número de migrantes llegados a Baleares con respecto a 2019 y este año estamos en las mismas cifras que el año pasado». Lo cierto es que en lo que va de año ya son más de 1.800 personas que han llegado en patera hasta nuestras costas.

La consellera de Servicio Sociales, Fina Santiago, a preguntas de este periódico, aseguró también ayer que las peticiones a Madrid también se refieren a contar con una mayor infraestructura de Salvamento Marítimo para poder atender a los inmigrantes.

Santiago indicó asimismo que el Govern ha ofrecido sus albergues para alojar a estos inmigrantes durante el periodo que se realiza el proceso de identificación por parte de las autoridades policiales. En este sentido, la titular de Servicios Sociales apuntó que ya han hecho saber al Estado que «Baleares es una ruta de inmigración» y por ello precisan que en nuestra comunidad existan más recursos humanos e infraestructuras para atender esta problemática.

El Estado está habilitando las antiguas instalaciones militares de Son Tous para poder albergar a los inmigrantes, ya que en estos momentos no cuenta con ningún centro de internamiento y, una vez identificados, no les queda otro remedio que dejarlos libres o bien alojarlos en los aparcamientos de la comisaría de la Policía Nacional.

Debate político sobre migración

El hecho de que ayer coincidieran dos preguntas a la presidenta del Govern sobre inmigración ilegal, una del PP y otra de Vox casi con el mismo texto, provocó la controversia en el Parlament. Ello propició que Armengol recriminara a los populares que «coincidan con la extrema derecha».

El tono de Toni Costa, portavoz del PP, fue del todo diferente al utilizado por líder de Vox, Jorge Campos. El popular reclamó a la presidenta una gestión «coordinada, eficiente y humana, ya que Baleares tiene que ser primera zona de frontera». El popular ofreció su apoyo al Govern para presionar a Madrid al considerar que «Pedro Sánchez los está dejando tirados en este tema».

No obstante, ante las insinuaciones de Francina Armengol, Costa quiso marcar distancia con Vox: «Entre el populismo y el pasotismo hay espacio», aseveró. 

La presidenta del Govern aprovechó la contestación para anunciar que han reclamado más recursos a Madrid. Agradeció el ofrecimiento de colaboración del PP aunque le recriminó que se sitúe en los mismos planteamientos que Vox. Armengol añadió «sentir envidia al ver cómo en países europeos la derecha no va en ningún caso con la extrema derecha».

Francina Armengol donde sí se mostró contundente fue contra las palabras del representante de Vox, Jorge Campos, quien responsabilizó al Govern de la inmigración por su colaboración con organizaciones no gubernamentales que «se relacionan con las mafias de la inmigración» y negó que los tripulantes de pateras «huyan del hambre y la guerra».

La presidenta del Govern cargó contra Campos al acusarle del «discurso del odio y la demagogia, que parece mentira que se haga en un Parlament después de la desaparición de tres personas ayer mismo». La jefa del Ejecutivo le recordó también que «el inmigrante no es el culpable, es la víctima de la desigualdad», en contestación al líder del partido de la extrema derecha. La jefa del Ejecutivo indicó también que «nunca su Govern se ha puesto de perfil en esta cuestión y trabaja para dar una atención digna».