El diputado y portavoz del PP en el Parlament, Antoni Costa, acusó ayer al Estado de «dejar tirada» a Baleares ante la última avalancha de pateras llegadas el pasado fin de semana. «No hay duda de que hay una ruta migratoria entre Baleares y el norte de África». Costa insistió en que «pese a que el PP lleva meses avisando de lo que iba a suceder, nadie ha hecho nada para evitarlo». El portavoz del PP calificó de «vergonzoso» el trato que reciben estas personas en las islas. «Una sociedad avanzada no se puede permitir tener migrantes durmiendo en un aparcamiento subterráneo». Por todo ello, Costa exigió que el Estado «reconozca a Baleares como primera línea de frontera con la Unión Europea, que implicaría disponer de los recursos humanos y materiales suficientes para el control de fronteras». Además, pidió que se haga un centro de atención temporal para estas personas.

Por otra parte, el diputado de Més per Mallorca, Miquel Ensenyat, pidió a las administraciones «tratar a los migrantes como personas», considerando que un «aparcamiento no es el mejor sitio para dormir y que las instalaciones para acogerles ya deberían de estar hechas». Ensenyat insistió en que es un drama para estas personas que «tengan que huir de sus casas», y señaló que «parece que otras rutas de migración se han sustituido por la de las islas». 

Mientras tanto, Jorge Campos, presidente de Vox en Baleares, consideró «insostenible» el número de pateras llegadas a Baleares. Alertó que «llegan elementos yihadistas en estas pateras de Argelia», por lo que consideró que las islas tienen un serio problema con el fenómeno migratorio. «Algo hay que hacer, hay que devolverlos a sus países de origen. No puede ser que Armengol y Sánchez sigan promocionando esta inmigración ilegal con la excusa del multiculturalismo que ha fracasado y que genera es inseguridad».

Por su parte, Unidas Podemos exigió un trato digno para estas personas llegadas en patera.