Era el gran objetivo en una temporada que empezó tarde y a medio gas, con una planta hotelera que fue abriendo de forma escalonada enfrentando noticias llenas de incertidumbre de los principales países emisores de turistas. Con agosto ya fuera del calendario, alargar la actividad turística más allá de mediados de octubre, a lo sumo, se vislumbra con pesimismo. Las ventas de última hora, que se han vuelto definitorias de este verano 2021 dificultan hacer previsiones más allá de una semana. Incluso para septiembre se pronostica que el volumen de negocio estará por debajo del 50 % respecto a la temporada de 2019.

Pimem presentó ayer su tercer informe turístico desde el punto de vista de la distribución hotelera, representado por las principales firmas tecnológicas con sede en la isla y se dejó claro que sigue reinando la preocupación, como externo Luis Sánchez, consejero delegado de Processing Smart. No obstante, se ha logrado superar la mitad del volumen alcanzado en el verano récord de 2019, gracias a que en julio y agosto se triplicaron las reservas, lo que ha supuesto «una brisa de aire fresco» para las empresas. Con todo, por las elevadas ventas de último minuto no hay claridad sobre el final de la temporada, en un entorno en el que los principales canales de reserva son las mayoristas y agencias online.

La atracción del mercado nacional en una coyuntura en la que por la pandemia iban a reinar los desplazamientos dentro del país apenas llegó al 10 % de la venta a través de agencias de viajes. Pero en lado positivo ayer se dejó claro que las previsiones para 2022 son buenas.

Más parejas y menos familias

Una tendencia clara que deja esta temporada pandémica es la caída del turismo familiar, frente al incremento de los viajes en pareja , con estancias muy cortas pues las más demandadas han sido las de entre cinco y siete días, cuanto anteriormente lo eran las que superaban los ocho días. «Podríamos estar ante un cambio de comportamiento de la demanda», señaló Jaime Monserrat, consejero delegado de Dingus, ante la que los hoteleros tendrán que adaptarse.

Carlos Feliu, de Bedsonline, la mayorista para agencias de viajes de Hotelbeds, destacó que en julio y agosto el turismo doméstico llegó a representar el 73 % de las reservas para estas.

Ante el gran valor que tiene el mercado nacional para las islas, los representantes de las empresas tecnológicas consideran prioritario promocionar el archipiélago para el turista local y nacional, potenciar el puerto para atraerlos, mejorar también la oferta aérea y adecuar los servicios hoteleros, las experiencias y los paquetes de todo incluido a su gusto.

Javier Pérez, de Fideltour, plataforma tecnológica especializada en fidelizar a los clientes de los hoteles, puso de manifiesto que el cliente que repite le sale un 25 % más barato al hotel que captar a nuevos, de ahí su importancia. Españoles y alemanes han sido los predominantes en el canal de fidelización. Pérez también dejó constancia de que entre los turistas repetidores las parejas desplazan a las familias.

Desde Juniper su director general, Juan Mateos, también certifica que no se vislumbran reservas para noviembre, su volumen es muy bajo para el invierno, aunque por el contrario para el próximo verano hay buenas perspectivas, cubriéndose ya la mitad de las recibidas esta temporada. Ampliar la promoción fuera de Europa y más allá del producto de sol y playa se considera primordial de cara a 2022.

La mitad de los hoteles con alza del 5%

Las ventas a través de la web de los hoteles suponen un 38 % en el caso del mercado español, y tan solo el 28 % con los dos principales países emisores, Alemania y Reino Unido, según datos aportados por Leonardo Llorente, de Roiback, el motor de reservas especializado en ayudar a las cadenas en la venta directa. Llorente advierte que aún hay establecimientos cuyo sistema de venta online «no se carga o entiende bien», de manera que el cliente acaba acudiendo a otra vía para hacer la reserva en esos mismos hoteles. La mitad de la planta de Balears incrementó sus tarifas un 5 % respecto a 2019, mientras que el resto del 50 % mantuvo o bien bajó sus tarifas.

Mallorca pierde terreno con el mercado nacional frente al resto de islas

El turismo doméstico hacia Balears representa el 10 % del total nacional, teniendo en cuenta que se ha logrado incrementar ligeramente respecto a 2019, según datos de Bedsonline. Mallorca todavía adelanta al resto de las islas, con un volumen del 44 %, pero estas últimas están ganando peso, Eivissa con un 21 %, Formentera, con un 5 %y Menorca ya con el 30 % . Las medidas sanitarias más restrictivas en el archipiélago, respecto al resto de destinos peninsulares y canarios, que incluían obligación de test de antígenos para los mejores de 12 años, han supuesto una desventaja para elegir Balears como destino vacacional este verano.