Cuatro aviones de caza sobrevolaron ayer la isla de Mallorca y aterrizaron en la base aérea de Son Sant Joan, en Palma. Las aeronaves eran del modelo F18, del Ala 12 de Torrejón de Ardoz (Madrid). El Capitán del ejercito del Aire, Manuel Ángel Cuenca López, explicó a Diario de Mallorca que se trataba de una instrucción «asidua», donde se prueba la capacidad cross service de los aviones militares. La misión de ésta es comprobar el mantenimiento de los vehículos aéreos así como su correcta funcionalidad. «Dentro de la cabina aérea van sólo los pilotos», comentó el capitán, para dejar claro que desde Madrid viajan las mínimas personas indispensables.

La razón por la cual aterrizaron en Son Sant Joan es que de esa manera permiten al personal de mantenimiento en formación «seguir instruyéndose», ya que ellos realizan la instrucción. Es decir, forma parte de sus prácticas realizar el ejercicio, por tanto se trasladan desde allí para hacer las pertinentes pruebas aquí, en Mallorca. Los cuatro cazas estuvieron toda la jornada en la isla, hasta las nueve y media de la noche, cuando regresaron de nuevo a su base aérea en Torrejón de Ardoz. 

Por otro lado, los vecinos de las zonas próximas a la base aérea de Son Sant Joan , como Son Ferriol, Casa Blanca, Can Pastilla o el barrio de Sant Jordi, se quejaron del ruido que generaban los aviones, ya que hicieron mucho estruendo ayer por la mañana mientras sobrevolaban el área. «Hicieron mucho ruido durante un buen rato», comenta una vecina de Son Ferriol. Y es que un avión de este tipo al despegar llega a alcanza los 130 decibelios, y su motor en marcha durante un vuelo los 120 dB. Estas cifras serían equivalentes al ruido que genera la mascletà valenciana durante la festividad de las fallas en el mes de marzo.