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Las autoescuelas baleares acumulan una bolsa de 9.000 alumnos para examinar

La patronal isleña achaca las esperas de dos a tres meses para obtener el carné de conducir al nuevo sistema implantado por Tráfico para asignar las pruebas - Las empresas han pedido a Pere Navarro un refuerzo de horas extras para los examinadores

Las autoescuelas reclaman más examinadores para evitar el colapso. B. Ramon

Las autoescuelas de Balears tienen este verano una bolsa de 9.000 alumnos a la espera de examinarse para obtener el carné de conducir, según denuncia la presidenta de la asociación que las representa, Joana Ribas. Eso supone que las personas que ya están en disposición de presentarse a las pruebas se ven obligadas a esperar entre dos y tres meses, una situación que desde esta patronal se considera inaceptable. Para intentar ponerle remedio, Ribas ha mantenido ya una reunión con el director general de Tráfico, Pere Navarro, en la que se le ha reclamado un refuerzo en las horas extras que pueden realizar los examinadores.

La asociación balear de autoescuelas responsabiliza de este ‘atasco’ al nuevo sistema CAPA (Capacidad de las Pruebas de Actitud) implantado por Tráfico, que asigna a cada uno de estos centros de enseñanza un cupo de alumnos para poder presentar a examen, lo que según Joana Ribas solo ha supuesto trasladar a éstos el problema del déficit de examinadores. También la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) se ha posicionado en contra de esta fórmula, al considerar que el problema nace de que no hay un número suficiente de examinadores y de que éstos no están adecuadamente distribuidos por todo el territorio nacional.

En cualquier caso, el conflicto radica ahora en la bolsa de algo más de 9.000 alumnos en los centros de las islas que se están viendo obligados a esperar unos dos meses para obtener el carné de conducción de automóviles, demora que se eleva a los tres meses en el caso de los de motos, según denuncia la presidenta de la asociación balear. Esta bolsa la componen unos 7.200 aspirantes al carné para turismo, en torno a los 650 para motocicleta, y alrededor de 700 para camión, a los que se suman cifras inferiores de otras categorías.

Hay que recordar que el verano es la época del año en la que se registra una mayor concentración de alumnos, dado que los jóvenes que han cumplido los 18 años acuden de forma masiva durante sus vacaciones estivales a las autoescuelas para conseguir esa autorización para ponerse al volante.

De este modo, esas esperas tan prolongadas suponen un serio quebranto para muchos de ellos, especialmente en el caso de los que cursan sus estudios universitarios en otras comunidades autónomas, dado que la fecha para examinarse que les termina correspondiendo les llega con el curso ya iniciado.

Pero además, la demora en el examen obliga al alumno a seguir pagando clases que no le serían necesarias para mantener frescos sus conocimientos, con el quebranto económico que ello supone, o en el caso de no hacerlo, llegar al examen peor preparados, lo que conlleva de aumento en el número de los que deben de repetir la prueba y un déficit en materia de seguridad viaria si la superan.

Reunión con Pere Navarro

Ante el alcance de este problema, Joana Ribas mantuvo recientemente una reunión en Madrid con el director general de Tráfico, en la que se planteó como solución urgente la autorización para que los examinadores de las islas puedan realizar más horas extraordinarias.

El problema, según la presidenta de la patronal balear, es que esta medida necesita el visto bueno del ministerio de Hacienda, que todavía no se ha obtenido, de ahí que por el momento se mantenga el conflicto.

Desde las autoescuelas se lamenta el retroceso que la actual situación supone. Hay que recordar que en enero de 2019 se vivió un grave problema, dado que la espera para examinarse llegó a acercarse a los cuatro meses, lo que provocó que las autoescuelas de las islas llegaran a amenazar con organizar una caravana de vehículos como protesta, con la previsión de colapsar los accesos a Palma.

Ante esta situación, Tráfico optó por reforzar el equipo de examinadores de Balears, lo que permitió reducir esa demora en febrero a los dos meses y medio, y a finales de ese año ya era solo de 15 días, alcanzando entonces el nivel que se considera óptimo.

LAS CLAVES

  • Reivindicación: Pendientes de las horas extras de los examinadores

Las autoescuelas han pedido a Tráfico que autorice horas extras a los examinadores, lo que está pendiente de la autorización del ministerio de Hacienda.

  • Demora: Esperas de dos y tres meses para examinarse

El ‘atasco’ generado en Tráfico hace que los alumnos deban de esperar entre dos y tres meses para poder examinarse y obtener el carné.

  • En el peor momento: Unos 9.000 alumnos afectados por las demoras

El verano es la época del año con mayor demanda en las autoescuelas, lo que explica que el problema esté afectando a unos 9.000 aspirantes.

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