La Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (PIMEM) pidió ayer al Govern que estudie la posibilidad de eliminar el requisito sobre la declaración de beneficios de 2019, para así ampliar el número de empresas que puedan acceder a las ayudas previstas para paliar los efectos de la crisis sanitaria.

Según informó esta patronal, una de cada tres empresas queda automática excluida de las ayudas, «ya que un 33% de estas ya había declarado pérdidas en 2019».

Por este motivo, PIMEM pide flexibilizar el requisito y «que haga lo mismo que han hecho siete comunidades autónomas». De esta manera, «más empresas podrán participar de dichas ayudas».

En cuanto a la caída del 30% en la facturación de 2020 con respecto a 2019 y la obligación de estar al corriente de pago con Hacienda y la Seguridad Social, se afirmó que «son requisitos válidos». Aun así, sectores como la restauración «han tenido pérdidas que llegan hasta el 70%, por lo que es difícil estar al corriente de pago», según se añadió.

En este sentido, el director del Observatorio de Financiamiento de PIMEM, Tolo Gomila, manifestó que «sorprende que unas ayudas que son finalistas para pagar deudas y ponerse al día, precisamente exijan estar al día». Además, aseguró que «es discriminatorio pedir beneficios en el ejercicio de 2019».

La patronal también reclamó que en el caso de sobrante de presupuesto de ayudas se cambien los criterios y se elimine para las pymes el tope de caída de la facturación en 2020, para sólo tener en cuenta el límite de gasto elegible.

«En caso de que no se agote el presupuesto, en vez de dar más dinero a las grandes empresas y que se sobrepasasen los 500.000 euros de ayuda, las pymes deben recibir hasta su gasto elegible», indicó el presidente de PIMEM, Jordi Mora.