La Policía Local de Palma, junto a la Policía Nacional, continuará con los dispositivos para evitar los botellones. Es el sexto fin de semana que se realiza este operativo especial, después de que el Supremo anulara el toque de queda impuesto en Balears. Desde entonces se han producido numerosas concentraciones de jóvenes que han organizado botellones en la vía pública, una actividad que está prohibida por las normas.

El operativo de control policial ya se desarrolló en la noche del jueves, según anunció ayer la teniente de alcalde, Joana Adrover, y seguirá estos próximos días. La responsable del área de Seguridad Ciudadana de Cort recordó que las personas que sean sorprendidas participando en un botellón se enfrentan a sanciones individuales que pueden alcanzar los 3.000 euros.

Las principales zonas donde se desarrollarán estos operativos de control serán los polígonos industriales y la primera línea de la Platja de Palma, donde la pasada noche ya se actuó para evitar concentraciones de gente. Al mismo tiempo, también se informa a los negocios sobre las limitaciones de la venta de alcohol.