Balears registró durante el mes de mayo la venta de 1.078 viviendas, un 61,6% más que en el mismo mes de 2020, según datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Sin embargo, y aunque se superan las 667 del pasado año, aunque se está lejos de las 1.535 alcanzadas en mayo de 2019.
Esto representa una tasa de 110 compraventas por cada 100.000 habitantes, inferior a la nacional, de 125. El incremento interanual de las compraventas en Balears es el más leve de todas las comunidades autónomas.
De las 1.078 viviendas vendidas durante mayo en las islas, solamente 23 eran protegidas. Además, 211 eran nuevas y 867 de segunda mano.
Otras 162 viviendas se transmitieron por donaciones, tres por permuta, 347 por herencias y 405 en operaciones de otro tipo.
En general, en Balears se transmitieron durante el mes de mayo 4.909 fincas de todo tipo y en cualquier clase de operación. Esto supone el doble (113%) que el año anterior y una tasa de 501 transmisiones por cada 100.000 habitantes, superior a la nacional (491). Del total de fincas transmitidas, 1.131 son rústicas y 3.778, urbanas.
En el conjunto de España, la compraventa de viviendas se disparó un 107,6% el pasado mes de mayo en relación al mismo mes de 2020, hasta sumar 47.033 operaciones.
En opinión de la Asociación Balear de Servicios Inmobiliarios (ABSI), el descenso que se mantiene respecto a 2019 se produce porque todavía hay mucha población en ERTE y se vive una situación de incertidumbre, aunque se pronostica que la situación irá mejorando en los próximos meses y que en 2022 los datos serán ligeramente superiores.
Respecto a los precios, se afirma que se han mantenido estables en los últimos meses pero que se empieza a notar un ligero repunte debido a la apertura turística.
Por contra, se apunta que las operaciones de alquiler sí han sufrido una bajada importante en el precio, sobre todo aquellas viviendas de más de 900 euros al mes, de un 15% a un 20%.
