La consellera de Salud, Patricia Gómez, rechaza hacer autocrítica y defiende toda la actuación del Govern en la gestión del macrobrote de estudiantes originado en Mallorca y que ha dejado más de 2.000 positivos en toda España. La titular de Salud defiende desde la gestión previa a que se gestara el brote como el posterior confinamiento forzoso de los menores tumbado por la justicia. De hecho, la consellera lamentó la decisión judicial y la «impotencia de dejar salir a personas de las que sabíamos que habría positivos». Por contra, Gómez apunta a los organizadores de los viajes, contra los que ayer aseguró que se ha pedido actuar judicialmente al Gobierno.
La consellera Gómez compareció ayer en el Parlament para dar explicaciones del brote, del que defendió que no es «la responsable de los contagios» y que «la magnitud del brote obligaba a actuar con rapidez». En este sentido cifró que a 30 de junio había 2.135 positivos, 302 casos secundarios, 8.125 contactos estrechos, 19 hospitalizados y uno en UCI.
La consellera defendió el confinamiento forzoso de los estudiantes peninsulares en la certeza de que entre los contactos estrechos habría más positivos, como se evidenció en su llegada a Valencia, por lo que insistió en que «no estamos de acuerdo» con la resolución judicial que tumbó el confinamiento forzoso. «Lo que no quiere decir que no lo acatemos o que queramos interferir en la justicia», quiso manifestar.
"La magnitud del brote nos obligaba a tomar medidas rápidamente"
«Me queda la sensación de impotencia de haber dejado salir a personas de las que sabíamos que habría positivos», lamentó en alusión a los 118 jóvenes que salieron en barco a Valencia y de los que 14 dieron positivo nada más llegar. «Estoy segura que si lo miramos, habría más entre el resto», pronunció la consellera de Salud.
Armengol no comparece
La consellera explicó incluso que entre los estudiantes andaluces de los que Vox denunció su «secuestro» por no haber asistido al concierto de la Plaza de Toros ni coincidir con los otros grupos, de 49 jóvenes, 33 dieron positivo.
Desde la oposición, que denunció que no comparezca la presidenta Francina Armengol, cuya comparecencia volvió ayer a rechazar el Pacto, la popular Marga Durán y el diputado de Ciudadanos Juanma Gómez criticaron la falta de prevención con los viajes de estudiantes y la autorización pese a los informes en contra del concierto de la Plaza de Toros. «¿Alguien asumirá alguna responsabilidad?», pidió el naranja.
"Me queda la impotencia de dejar salir a jóvenes que sabíamos que serían positivos"
«¿Cómo podíamos prever que una vuelta en barca se convirtiera en una ‘party boat’?», preguntó por una lado Gómez, señalando, por otro, que «los conciertos están permitidos con unas condiciones, el Govern no autoriza nada».
Cuatro positivos
Mientras la consellera de Salud, Patricia Gómez, lamentaba que de los 118 estudiantes salidos en el barco burbuja, la veintena de madrileños no se hicieron prueba diagnóstica a su llegada a Valencia, a diferencia de los estudiantes andaluces y vascos, el consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, informaba ayer que cuatro de esos estudiantes han dado positivo, lo que eleva a 18 los positivos entre los estudiantes a quien la jueza permitió salir y rechazaron hacer cuarentena. Por otra parte, la consellera Gómez informó que, según las primeras pruebas, los jóvenes vascos se contagiaron con la variante india.
