Tanto el conseller de Transición Energética, Juan Pedro Yllanes y la consellera de Hacienda y Relaciones Exteriores, Rosario Sánchez, han asegurado que para blindar climáticamente Baleares, se debe seguir un proceso "transversal", en todos los sectores, en especial en el productivo.

Esta mañana se presentaba al cuerpo insular de las Islas, constituido por una veintena de países europeos, cuales son los objetivos, de cara a 2030 y 2050, marcados en la agenda del Govern con perspectiva climática y de sostenibilidad.

El nuevo modelo se pretende construir en base a dos premisas: la soberanía energética y su democratización. "El desarrollo de la transición energética tiene que ser socialmente justo, participativo e inclusivo", señala Yllanes.

Los objetivos principales son: llegar en 2030 a una implantación del 35% en energías renovables, y un 100% en 2050. Se pretende reducir las emisiones a la atmósfera en un 40% para 2030 y un 90% en 2050. Para 2025, se prevé prohibir la circulación de vehículos diesel y en 2035, la de vehículos de combustión. También, se intentará poner en marcha el Decreto de huella de carbono, de renovables, de eficiencia energética y de movilidad sostenible.

Algunos logros que ya se han conseguido, son el montaje de 2850 instalaciones de autoconsumo en las islas, de los cuales 1600 se han efectuado en 2020 y 2021.

En relación con la movilidad eléctrica, somos la segunda comunidad autónoma con más puntos de carga, ya que sólo nos supera Cataluña. Actualmente contamos con 560 puntos de carga públicos, y se estima que la cantidad llega a 800 teniendo en cuenta los privados. Para 2025, se esperaba llegar a la cifra de 1000, pero desde la Conselleria estiman que se logrará en 2023. Otro factor importante, relacionado con este objetivo, es que hemos sido la primera comunidad del país en aprobar el MOVES III (Plan de ayudas directas para fomentar la compra de coches eléctricos).

Para lograr todas las marcas impuestas, los fondos europeos estiman una inversión millonaria para relanzar el modelo sostenible.

El director general de Energía y Cambio Climático, Pep Malagrava ha explicado que la Ley 10/2019, de 22 de febrero, sobre el cambio climático y transición energética de las Illes Balears, ha sido pionera en todo el Estado español y que "nos dota de un marco de gobernanza multinivel para que cada administración se implique". De tal manera que el marco jurídico permita que el conjunto de administraciones, expertos y el conjunto de la ciudadanía sean partícipes. Un ejemplo de ello, es la colaboración del Instituto Balear de la Energía como brazo ejecutor de proyectos públicos de energía para la administración pública.