La vicepresidencia y conselleria de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática y la Cámara de Comercio ofrecerán bonos a los ciudadanos de Balears para gastar 30 euros en los pequeños comercios que se adhieran al proyecto, de los que el Govern subvencionará diez. Cada residente en las islas podrá solicitar un máximo de cuatro bonos. 

El presupuesto para la ejecución de la iniciativa es de más de un millón de euros (1.000.000 euros asignado a la convocatoria, y 66.550 euros para la Cámara de Comercio como entidad colaboradora para la gestión y la ejecución del programa). Este proyecto fue aprobado ayer por el Consell de Govern.

Hay que señalar que el vicepresidente y conseller de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, Juan Pedro Yllanes, mediante una resolución de 3 de junio de 2021, ya ordenó el inicio del expediente para formalizar este convenio de colaboración a raíz de la situación extraordinaria generada por la crisis sanitaria de la covid-19. La Cámara de Comercio se encargará de la tramitación y, según Yllanes, se realizará un control por parte de los comercios para evitar que «se produzca fraude» y se soliciten más bonos que los cuatro permitidos por persona.

Con este proyecto, el departamento que dirige Yllanes pretende «apoyar e impulsar la actividad económica comercial de Balears para que los pequeños comercios puedan afrontar y reducir el impacto que el estado de alarma ha podido provocar en estas empresas, y así poder reactivar de forma rápida el pulso de la economía balear, poder continuar con la actividad que estaba desarrollando y adaptarla a criterios de competitividad». 

El vicepresidente del Govern recordó que estos bonos funcionarán en el ámbito territorial de Balears, puesto que nuestros pequeños comercios son los agentes esenciales en la dinamización comercial de los municipios».

Fomentar ventas

El programa de estímulo del sector comercial minorista ‘Baleares Bonos de Comercio’ pretende fomentar las ventas de las empresas comerciales detallistas y promover que los ciudadanos de las islas adquieran bienes de consumo como medio para fortalecer el tejido de las pequeñas empresas. 

Es el caso de establecimientos abiertos al público de autónomos, microempresas y pequeñas empresas, y, con esto, «impulsar la dinamización de los entornos urbanos como complemento a las medidas de revitalización y dinamización de entornos urbanos, especialmente después de la crisis generada por la pandemia», afirman desde el Govern.