La empresa automovilística Seat ha puesto a disposición del Govern tres grandes camiones de los usados en rallys y Fórmula 1 que han sido adaptados para labores de vacunación y que serán ubicados en las tres islas, en las localidades de Santa Ponça, Sant Antoni y Maó, con una capacidad de dosificación de 20.000 vacunas a la semana cada uno de ellos. La vacunación en estos camiones comenzará el próximo día 23 de junio y se podrá concertar cita para ser inmunizado en ellos a través de la aplicación BitCita.

La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha querido agradecer la "colaboración totalmente gratuita" del grupo automovilístico que ayudará a agilizar la vacunación de los baleares. La dirigente ha subrayado que en los nuevos dispositivos se seguirá vacunando a la gente en función de los grupos de edad que estén siendo inmunizados y ha admitido que en estos nuevos recursos permitirán "aligerar la sobrecarga que están sufriendo los centros de salud" en esta campaña de vacunación.

Patricia Such, responsable de Salud, Seguridad y Emergencias de Seat, ha subrayado la colaboración de su grupo primero en la Generalitat de Catalunya y ahora en Balears "para conseguir tener vacunado al 70% u 80% de la población lo antes posible". En este sentido, ha recordado las iniciativas desarrolladas por Seat en esta pandemia entre la que destacó la utilización de piezas de su modelo Seat León para confeccionar respiradores de emergencia en uno de los momentos más duros de esta crisis sanitaria, en abril de 2020.

La consellera de Salud, Patricia Gómez, que asistió a la presentación de los camiones vacunadores junto al director general del IB-Salut, Juli Fuster, ha señalado que también han hablado con clínicas privadas y mutuas laborales para acelerar el proceso de vacunación pero, al parecer, ninguno de estos contactos habría fructificado debido a las condiciones que impone la conselleria de Salud en cuanto a conservación y transporte de las vacunas, trazabilidad de las dosis puestas y disposición del personal sanitario para acometer la tarea así como que la capacidad vacunatoria "compense". El pasado martes, el director del Servei de salut reveló que habían rechazado un ofrecimiento de una clínica privada porque tan solo les ofrecía vacunar a unas 150 personas semanales.