La Audiencia Provincial de Palma ha confirmado que Diego Torres quede ya en libertad por causas médicas y laborales. El tribunal ratifica la decisión de un juzgado de vigilancia penitenciaria de Cataluña, que acordó en octubre conceder al exsocio de Iñaki Urdangarin un régimen especial por el que ya ni siquiera debe pernoctar en prisión. La fiscalía había recurrido esta decisión al entender que no estaba justificada, pero la sección primera de la Audiencia ha rechazado sus argumentos.
Torres, condenado a cinco años y ocho meses de prisión por delitos de malversación, prevaricación y fraude a la administración por el caso Nóos, cumplía la pena en un centro penitenciario de Cataluña desde febrero de 2019. En junio del año pasado accedió al tercer grado, por el que solo debía ir a prisión a dormir, y poco después se le aplicó un régimen excepcional por el ya ni siquiera debía acudir a pernoctar. La Secretaria de Mesures Penals de la Generalitat primero y la jueza de vigilancia penitenciaria después consideraron adecuada esta medida por cuestiones médicas y laborales. Por un lado, Torres sufrió hace años una grave enfermedad pulmonar que le convierte en persona de riesgo ante el coronavirus. Por otro, su nueva vida laboral y la labor de voluntariado que realiza le obligaban a realizar largos desplazamientos para ir a prisión a dormir.
La fiscalía se opuso a esta medida y presentó un recurso, al entender que se le concedía de forma encubierta la libertad condicional sin cumplir los requisitos. La Audiencia Provincial de Palma, que ha resuelto la disputa al ser el tribunal que enjuició los hechos, ha desestimado este recurso.
