La Asociación de investigación y conservación marina Cayume ha recuperado en un año más de 130 huevos de tiburones y rayas pescados de forma accidental, que ha logrado incubar en cautividad, lo que ha permitido a los investigadores liberar 17 ejemplares juveniles de estas especies en el mar en Baleares.

Las cifras son el balance provisional del proyecto "Eggcase2020" de conservación de elasmobranquios (tiburones y rayas) que comenzó el verano pasado en Mallorca, con la colaboración de la Cofradía de Pescadores del Puerto de Andratx y del Laboratorio de Investigaciones Marinas y Acuicultura (LIMIA) de la Dirección General de Pesca.

Esta semana han liberado en el mar 10 ejemplares de tiburón pintarroja y uno de raya santiaguesa, nacidos de parte de esos huevos recuperados de pesca accidental. Esta suelta se suma a otra anterior de varios ejemplares de raya.

El proyecto se puso en marcha para contribuir a la investigación y conservación de los elasmobranquios, porque el mar Mediterráneo alberga el 7 % de especies de este grupo de animales y se ha constatado el declive de muchas de las poblaciones.

El objetivo es mejorar la gestión de las capturas accidentales y ampliar el conocimiento sobre tiburones y rayas, especies vulnerables que se desarrollan lentamente, tardan en alcanzar la madurez sexual y presentan una tasa de fecundidad baja, lo que disminuye su capacidad de recuperación frente a la sobrepesca.

El presidente de Cayume, Guillem Félix, hace un balance positivo del proyecto por la buena respuesta del sector pesquero y porque, de los huevos que han recogido, "un porcentaje considerable se ha conseguido que lleguen a eclosionar y a nacer", explica en declaraciones a Efe.

Félix considera los logros del proyecto "un paso importante", no tanto de cara a repoblar con este método, porque las cifras de sueltas no incidirán sobre las poblaciones, pero sí por los avances realizados "en el aprendizaje de la incubación de estos huevos, que no está muy estudiada, y en el análisis de la incidencia real de la pesca accidental de huevos".

El proyecto ha permitido a los científicos mejorar el conocimiento sobre el proceso de incubación de distintas especies, "cada una con sus peculiaridades, sus tiempos y sus temperaturas", para poder centrarse en el futuro en las especies que requieran apoyo.

El responsable de Cayume destaca también la relevancia divulgativa del proyecto porque la mayoría de la población "desconoce que en Baleares hay tiburones y rayas".

Los investigadores tienen en la actualidad una veintena de huevos de pintarroja en incubación y una decena de distintas especies de rayas.

Al trasluz, un huevo de pintarroja encontrado en una playa

Al trasluz, un huevo de pintarroja encontrado en una playa

Con la colaboración de la Cofradía de Pescadores del Puerto de Andratx, Cayume ha recogido los huevos que las embarcaciones colaboradoras pescan de manera accidental durante su jornada, además de los huevos que son encontrados en el interior de las hembras pescadas antes de su llegada a la lonja.

Finalizado el proyecto piloto, la intención de Cayume es darle continuidad e incluso extenderlo, algo que analizará la asamblea de esta entidad sin ánimo de lucro y que dependerá del apoyo que consigan.