La cadena RIU adquirirá al Grupo TUI el 49 % de la propiedad de 19 hoteles que operan bajo la marca RIU Hotels & Resorts, además de dos terrenos con proyectos en desarrollo, que están en construcción en México y Senegal, por 670 millones de euros.

En plena crisis, la hotelera mallorquina patrimonialista se hace más fuerte ampliando sus propiedades familiares en un año en el que, por otro lado, puso a la venta tres de sus establecimientos, en Lanzarote, Madeira y Panamá. 

Los 19 activos que hasta ahora eran propiedad de los dos socios estratégicos, con una participación del grupo alemán del 49 % y de la familia Riu en un 51 %, según explica la hotelera en un comunicado, se reparten entre Canarias (7 establecimientos), Andalucía (1) y el extranjero, 4 en México, 2 en Panamá y el resto entre Dubái, Miami, Bahamas, Punta Cana, y Portugal, uno en cada destino. Todos ellos formaban parte de la sociedad RIU Hotels S.A.

Luis y Carmen Riu, consejeros delegados, y Naomi Riu, directora financiera.

La operación, que aprobó ayer el Consejo de Administración de TUI, está valorada en 670 millones de euros. Curiosamente, el grupo alemán se refiere en su nota de prensa a ese 49 % que adquiere ahora RIU como unas «acciones minoritarias» de TUI «en una cartera inmobiliaria previamente compartida» en los 19 hoteles y las dos propiedades en desarrollo en México y Senegal. 

Por su parte, la familia RIU destaca que «la lealtad» ha presidido las negociaciones de la operación, porque ambas empresas tienen voluntad de mantener y reforzar su relación estratégica y comercial a largo plazo. TUI mantiene la participación del 50 % en RIUSA II S.A., la empresa que gestiona y opera los hoteles de la marca RIU y que fundaron ambas compañías en 1993.

La familia Riu destaca que «la lealtad» ha primado en la negociación y seguirá su relación estratégica

Desde la cadena mallorquina se explica que la operación se enmarca en la situación de crisis por la pandemia que ha afectado profundamente a la industria turística. En su caso estuvieron tres meses con sus cien hoteles cerrados y el año pasado perdieron el 60 % de su facturación, con unas ventas brutas de 826 millones de euros.

Ahora, cuando la compañía está avanzando en su reactivación, con el objetivo de mantener los puestos de trabajo, y planea arrancar junio con 76 hoteles abiertos en quince países desde el día, acomete esta gran operación, endeudándose, porque «sigue y seguirá apoyando» a TUI, su socio estratégico y comercial alemán, su principal turoperador para llenar sus hoteles, «a largo plazo» y en el que tiene una participación que roza el 3,6% de TUI. La familia mallorquina, como explicó Naomi Riu, directora financiera, a este diario, acudió a la ampliación de capital del gigante alemán para seguir manteniendo su porcentaje accionarial.

La compañía germana mantiene el 50% de la sociedad que gestiona la cartera hotelera de la marca mallorquina

La hotelera que lideran Carmen y Luis Riu resalta que su modelo patrimonialista muestra en estas crisis sin parangón en el sector la ventaja que supone ser dueños de sus hoteles, por lo que la propiedad total de estos 19 hoteles aporta un extra de agilidad ante los posibles cambios de paradigma del futuro cercano.

Por su parte, TUI justifica la operación en que su nuevo crecimiento en la crisis se dirige más a la gestión hotelera que a la propiedad inmobiliaria, con experiencias de vacaciones y el desarrollo, operación y marketing de marcas hoteleras.