El obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, ha nombrado a Esther Romero nueva directora de Càritas Mallorca. La ONG de la Iglesia atraviesa desde hace años una grave crisis institucional, que afecta al liderazgo interno y a la escala laboral, afectando a su trabajo y funciones sociales. Con la incorporación de Romero, el prelado intenta poner un poco de orden en la entidad.
El nuevo nombramiento llega después de que el último fichaje para el cargo, Boni Martínez, ni siquiera tomara posesión una vez anunciado por el propio Obispado. Aunque Romero llega con muy buenas referencias tras su paso por la Cruz Roja de Palma, donde estaba al frente del voluntariado, y de su tarea como misionera laica en Perú, en los últimos años, ha sorprendido en ambientes eclesiásticos habida cuenta del talante progresista de Taltavull, que ha optado por un perfil conservador para el puesto. Romero pertenece al Camino Neocatecumenal, más conocido popularmente como 'los Kikos', un movimiento dentro del catolicismo que considerado ultraconservador para muchos otros sectores.
Según fuentes de la diócesis, el obispo no quiere más conflictos tras el ridículo por el fallido nombramiento de Martínez, y se ha decidido implicar personalmente en dar un cambio de rumbo a Càritas.
