La consellera de Salud, Patricia Gómez, anunció ayer que el primer trasplante hepático de esta comunidad previsiblemente se acometerá este mismo verano. La consellera eludió concretar la fecha de la intervención limitándose a afirmar que se hará cuando los profesionales que intervendrán en este primer trasplante estén preparados.

Fuentes sanitarias ligadas a este proceso asistencial confirmaron que la preparación está muy avanzada y que está previsto que para esta primera intervención se desplacen dos profesionales del hospital Clínic de Barcelona, un cirujano y un anestesiólogo, para ayudar a los profesionales de Son Espases. Estos han estado formándose y adquiriendo pericia en el centro de la Ciudad Condal desde hace ya meses.

Las fuentes citadas estimaron entre 25 y 30 trasplantes hepáticos los que se podrían realizar cada año una vez que este nuevo programa alcance su velocidad de crucero, circunstancia que estimaron que se producirá en un plazo de unos dos años después de la realización del primer trasplante de hígado.

En esta comunidad se realizan en estos momentos trasplantes renales, de córnea, de médula ósea y de órganos sólidos, acotó el coordinador autonómico de trasplantes, Miguel Agudo.

Este anuncio se hizo durante un acto de reconocimiento tras alcanzarse la cifra de 1.000 donantes de órganos captados en esta comunidad autónoma al que asistió la directora de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Beatriz Domínguez-Gil, que subrayó que tras esa cifra fría e impersonal había mil fallecimientos y el sufrimiento de otras tantas familias.

Y reveló que tan solo entre un 1% y un 2% de las personas que fallecen en los hospitales reúnen las condiciones para ser donantes. «Un donante que posibilita seis trasplantes regala 56 años de vida a los receptores», resaltó.

El coordinador de trasplantes del hospital de Son Espases, el también jefe de la UCI Julio Velasco, reveló que el 85% de los riñones donados en las islas el año pasado se quedaron en el archipiélago y propiciaron un total de 72 trasplantes renales y que desde el año 2016, cuando Son Espases empezó a captar a donantes en asistolia (en parada cardiorrespiratoria frente a los tradicionales en muerte encefálica) han conseguido a 77.

Al alimón con la directora de la ONT, Velasco explicó que los riñones que se envían fuera son para pacientes hiperinmunizados que ya han recibido varios órganos anteriormente y su sistema inmune rechaza más intervenciones. «Encontrar un órgano compatible para ellos es como hallar una aguja en un pajar», apuntó Domínguez-Gil para justificar este programa solidario a nivel nacional.

De la misma manera, ambos expertos se refirieron a la utilización de la máquina ECMO (que suple la función de los pulmones y el corazón del paciente) para mejorar la extracción de los órganos de un donante en asistolia. «Los donantes fallecen por una parada cardiorrespiratoria y sus órganos dejan de recibir flujo sanguíneo y se deterioran. Por eso, para mantenerlos en buen estado, se usa esta máquina que les perfunde sangre oxigenada», explicó la directora de la ONT.

Velasco reveló que aquí se ha empleado esta técnica unas 15 veces para extraer hígados ya que, resaltó, los urólogos de Son Espases tienen una gran pericia para obtener los riñones de estos donantes sin la participación de la ECMO. 

Evolución de donantes de órganos en Baleares (1989-2021) Fuente: Son Espases

Julio Velasco: «Los extranjeros donan más aquí que en su país»

Que el 25% de los donantes de las islas sean extranjeros lo achaca el coordinador de trasplantes de Son Espases a la labor de concienciación que realizan los equipos médicos con sus familias. «Los médicos de su país no están tan encima de ellas como lo estamos aquí, ya que consideramos que es la labor más importante del proceso», explicó Julio Velasco congratulándose de que «donan más aquí que en sus propios países de origen». El coordinador añadió que algunos de estos donantes foráneos son turistas que han sufrido un percance durante sus vacaciones así como extranjeros residentes.