El Govern va a retrasar el toque de queda a las once de la noche a partir del próximo lunes, con el objetivo de dar a bares y restaurantes más tiempo para poder ofrecer cenas de lunes a jueves, una vez que se ha decidido ampliar la capacidad y el horario de sus terrazas, pero manteniendo la prohibición de abrir el interior de los establecimientos, tal y como adelantó ayer Diario de Mallorca.

El Consell de Govern extraordinario que se celebrará el viernes va a aprobar un nuevo paso en la desescalada, que en el caso de bares, restaurantes y cafeterías supone ampliar el aforo de sus terrazas al 100%, y permitir de lunes a jueves que ofrezcan cenas desde las 20 a las 22:30.

Para ello, el toque de queda pasará a aplicarse desde las once de la noche hasta las 6 de la mañana en el conjunto de las islas.

Eso supone que la restauración podrá mantener esos exteriores abiertos hasta las 5 de la tarde, como hasta ahora, y reabrir de nuevo a partir de las 8 o las 8,30 durante las jornadas semanales antes señaladas. Esta interrupción en su actividad durante unas tres horas tiene como objetivo evitar el denominado ‘tardeo’, es decir, el consumo de bebidas alcohólicas durante las tardes. La prolongación de horarios no se aplicará durante los fines de semana.

La medida tiene como objetivo mejorar los ingresos de los negocios de restauración, una vez decidido que por el momento no se va a autorizar la reapertura del interior de los locales al considerar que es donde se registra el mayor riesgo de contagios.

Además de ampliar el aforo de las terrazas, se mantendrá el límite de cuatro personas por mesa, pero éstas podrán pertenecer a más de dos núcleos de convivientes.

Reuniones de hoy

Esta flexibilización de las restricciones que pesan sobre el sector de la restauración serán abordadas hoy en las reuniones que la conselleria de Turismo ha convocado con representantes de sindicatos y patronales.

En cualquier caso, desde estas últimas ya se ha advertido que van a mantener su reivindicación de que se les autorice a abrir de nuevo el interior de sus establecimientos.

Las reuniones familiares en zonas exteriores, como jardines, podrán ser de más de dos núcleos de convivencia

El vicepresidente de Restauración-PIMEM, Helmut Clemens, ha recordado que la mayoría de los negocios del sector no disponen de terraza, por lo que califica de «tomadura de pelo» la desescalada prevista por el Govern. En este sentido, advierte de que cada día crece el número de locales que se ven obligados a cerrar de forma definitiva, y afirma que esta cifra no va a dejar de crecer a causa de la política que está siguiendo el Ejecutivo de Francina Armengol.

Por su parte, el presidente de Restauración-CAEB, Alfonso Robledo, es partidario de que se permita de nuevo la actividad dentro de los restaurantes, aunque sea solo para aquellos comensales que hayan reservado mesa con antelación, de forma que sea más fácil controlar a estos grupos.

Reuniones familiares

Otra de las medidas que el Govern tiene previsto aprobar el viernes es aplicar algunos cambios en las restricciones que pesan sobre las reuniones familiares.

En concreto, dentro de los domicilios se mantiene el límite de seis personas pertenecientes a un máximo de dos núcleos de convivencia, pero cuando éstas se produzcan en los exteriores, como terrazas o jardines de las viviendas, esas seis personas no tendrán limitado los grupos de convivientes a los que pertenezcan.

En materia de actividades deportivas, se podrán retomar las competiciones para los menores de 12 años.

La desescalada que el Govern quiere aprobar este viernes repercutirá también sobre la actividad comercial, al ampliar su horario de apertura hasta las 9 de la noche, en lugar de hasta las 8 como hasta ahora.

Al respecto, desde el sector se recuerda que en estos momentos se ven obligados a desalojar sus locales cuando todavía se cuenta con luz diurna y hay clientes potenciales paseando por las calles, de ahí que se trate de una media que venían reclamando desde hace algún tiempo las organizaciones empresariales que representan al sector.

Más días para el gran comercio

Una iniciativa de especial trascendencia es que se van a reducir las limitaciones que afectan a los grandes establecimientos y centros comerciales, al permitir que vuelvan a abrir sus puertas durante los diez festivos y domingos incluidos en el calendario con actividad autorizada de este año, y que tendrá el próximo 2 de mayo como fecha que marcará el pistoletazo de salida.

Además, aquellos situados en las zonas de gran afluencia turística, como en el caso del centro de Palma, podrán volver a abrir sus puertas todos los domingos a partir de la próxima semana, según se señaló desde UGT y CCOO tras la reunión mantenida ayer por los secretarios generales de sus respectivas federaciones sectoriales, José García y Silvia Montejano respectivamente, con el director general del ramo, Miguel Piñol.

Concretamente, el representante de la conselleria de Sectores Productivos informó de que la pretensión de su departamento es que también el aforo de las grandes superficies durante los sábados y domingos pase del 30% al 50%.

A cambio, estas instalaciones deberán disponer de medidores de dióxido de carbono en lugares que sean visibles para el público. Ahora ya debían contar con esos elementos, pero no siempre estaban en lugares accesibles.

En un primer momento, el director general informó a los sindicatos de que su pretensión era mantener el horario de cierre comercial a las 8 de la tarde, pero desde UGT se respaldó que el comercio tradicional pueda alargar una hora más su actividad. Por su parte, desde CCOO se alegó que el horario debería de ser el mismo para el conjunto del sector, independientemente del tamaño del establecimiento, para que afecte de igual modo al conjunto de las plantillas.

Desde los sindicatos se valora la prudencia de esta desescalada comercial y se recuerda que esta actividad está demostrando que no es un foco de contagios.