El ERE anunciado por CaixaBank se traducirá en 358 despidos en Balears y el cierre de una de cada cuatro sucursales abiertas en el archipiélago. Las salidas afectarán al 21% de la plantilla, formada por 1.673 trabajadores después de que hace un mes y medio culminara la fusión con Bankia, resultando una única entidad.

«Las condiciones para acordar bajas voluntarias que proponen están muy lejos de ser buenas, así que no creo que vaya a haber muchas salidas pactadas», ha valorado Joan Reynés, del sindicato Unió Obrera Balear (UOB). «Tampoco hay mucho margen para pactar despidos con condiciones más beneficiosas para los trabajadores mayores de 55 años. En Balears solo quedan unos 170 de esa edad y aunque todos quisieran irse, todavía habría que despedir a muchos trabajadores hasta llegar a 358», lamentó. 

CaixaBank ha planteado el mayor ERE de la historia de la banca: 8.291 trabajadores, el 19% de su plantilla en España. De este modo, la proporción de despidos es dos puntos más alta en Balears que en el resto del Estado. El ajuste se argumenta en la necesidad de evitar duplicidades después de que ambas entidades se fusionaran, dando lugar a al mayor banco del país.

308 sucursales en Balears

El plan, comunicado ayer a los sindicatos, también incluye el cierre de 1.534 oficinas en España, el 27% del total. No ha trascendido cuántas de las 308 sucursales que permanecen en el archipiélago echarán el cierre, pero desde UOB dan por hecho que se clausurarán una de cada cuatro, una proporción similar a la del resto del país. 

«El cierre de oficinas va a provocar una gran afectación a los clientes. Han garantizado que seguirá habiendo al menos una en cada pueblo, pero aplicarán el modelo de oficina desplazada», explicó Reynés. Este sistema se aplica en Sencelles y en Costitx, por ejemplo, donde existen dos oficinas gestionadas por un trabajador que se va desplazando de una a otra. De este modo se mantienen dos sucursales físicamente, pero cada una abre en horarios alternos. 

UOC espera que la empresa mejore las condiciones para pactar salidas voluntarios y propone, por ejemplo, bajar la edad de prejubilación de 55 a 54 años para ampliar el abanico de posibles voluntarios. 

Una red encogida

La red de sucursales ha encogido en los últimos años en las islas. La absorción de la antigua Sa Nostra por parte de Bankia hace una década ya se tradujo en la clausura de oficinas y bajas laborales. Desde entonces los clientes, especialmente los residentes en la Part Forana, han tenido cada vez más difícil tener una oficina cerca para hacer trámites presenciales.

El pasado 29 de marzo el logotipo de CaixaBank sustituyó al de Bankia en la histórica sede del polígono de Son Fuster. Está previsto que los distintivos de las sucursales sean sustituidos de manera progresiva.