Ante la incertidumbre reinante cerca de Semana Santa que un hotel pueda arrancar con reservas confirmadas es una buena noticia. Solamente con un par de turistas germanos se puso en marcha ayer el Pil·larí Playa, de la cadena Allsun, en Platja de Palma.
«El hotel, con 204 habitaciones, está abierto para ellos», explica Irene Triay, directora hotelera de la cadena Allsun, propiedad del turoperador germano Alltours. Triay lleva dos décadas trabajando en la compañía que suma 21 establecimientos en la isla, además de seis en Canarias y otros dos en Grecia.
Triay está al frente de un Allsun en Cala Rajada. Cuando este inicie su actividad, volverá a su lugar habitual de trabajo. El turoperador Alltours prevé ir reabriendo hoteles progresivamente en abril y mayo. De momento, con tres aperturas, sigue sus planes trazados antes de que el Gobierno alemán levantara la restricción de viaje a Balears desde el domingo pasado. Ayer también comenzó a operar el Allsun Bahía del Este, en Cala Millor, y mañana lo hará el Eden Playa en Platja de Muro.
«Había mucha incertidumbre, pero ahora somos positivos», comenta Irene Triay. De cara a la Semana Santa las previsiones del Pil·larí Playa apuntan que alcanzarán un 70 % de ocupación. Y de momento, hasta finales de marzo rozarán el 30 % o el 40 %.
En Son Sant Joan aterrizaron ayer tres vuelos con origen Alemania, en uno de ellos llegaba la primera pareja de clientes de este hotel. La expectación aguardando su llegada irá tornándose en normalidad en este establecimiento que antes de la crisis era el único de la cadena Allsun que se mantenía abierto todo el año. Hoy se espera a 25 huéspedes, a los que se irán sumando otros el fin de semana para llegar el lunes a 150 clientes. «Está muy bien para estas fechas», reconoce la directiva hotelera. Hay que tener en cuenta que la Semana Santa se daba totalmente por perdida, hasta que la curva de contagios de covid empezó a descender en la isla y Alemania levantó la restricción.
Tan solo están abiertos alrededor de cincuenta hoteles en Mallorca. No supone ni una cuarta parte de la planta en funcionamiento del año pasado antes de que estallara la crisis sanitaria, cuando más de doscientos establecimientos tuvieron que echar el cierre.
Con prudencia, los hoteleros están comenzando a reabrir. En Platja de Palma ayer se contabilizaron once establecimientos en funcionamiento, con 1.688 plazas, según datos de la asociación hotelera del destino. A los que se irán agregando otras aperturas, principalmente de grandes cadenas a partir del día 26. Hipotels prevé iniciar la actividad en dos hoteles, el Gran Playa de Palma y el Playa de Palma. Iberostar arrancará con el Selection Playa de Palma, Grupotel con el Acapulco Playa y se sumará el THB El Cid.
Los trabajadores que salen de los ERTE por este repunte de actividad a las puertas de Pascua lo celebran
RIU también ha actualizado sus planes. Al Festival ya en activo se unirán el día 25 el Playa Park (con 475 habitaciones, no iba a abrir hasta el 15 de abril), y el Concordia, el cual iba a estar cerrado hasta junio. «Con mucha cautela», se ha constatado un incremento en las reservas tras el anuncio de Alemania, señalan desde la cadena, en el Festival se ha pasado de un 31 % a un 68 % para la próxima semana.
Los trabajadores que salen de los ERTE por este repunte incipiente del sector lo celebran. RIU sumará 300 personas en sus tres hoteles. El Allsun Pil·larí Playa, unas treinta, entre ellos Lara Ripoll, la jefa de recepción. No trabajaba desde septiembre.
