La «salvación económica» de Baleares pasa por garantizar que las islas sean un destino seguro, por la puesta en marcha de mecanismos de rescate durante este año y por la recepción de ayudas para la transformación económica poscovid-19 de los sectores productivos del archipiélago, según se señala en la carta suscrita por el Cercle d’Economia de Mallorca y el de Menorca, la Universitat balear, las patronales CAEB y PIMEM, el sindicato UGT, la Cámara de Comercio y los colegios oficiales de economistas, arquitectos y abogados, que ayer fue entregada a la delegada del Gobierno, Aina Calvo, para que la haga llegar al presidente Pedro Sánchez.
Respecto a la necesidad de ser un «destino seguro» para el turismo, en ese documento se pone de relieve que es necesario vacunar en las islas a unas 9.000 personas diarias, para lo que «se requiere movilizar todos los recursos sanitarios disponibles públicos y privados», de forma que el 70% de la población quede inmunizada lo antes posible, además de disponer de certificados de vacunación que sean reconocidos en toda la Unión Europea.
Por ello, se advierte al presidente del Gobierno español de la necesidad de desarrollar un esfuerzo complementario para maximizar las dosis disponibles, y «adaptar la priorización de acuerdo con los principios éticos de necesidad, equidad, reciprocidad y solidaridad, según el contexto epidemiológico en cada momento así como el impacto socioeconómico de la pandemia en los grupos poblacionales y las regiones más desfavorecidas entre las que destaca Baleares».
En este sentido, se subraya la importancia de hacer llegar esta planificación a los mayoristas turísticos.
En cuanto a los mecanismos de rescate, se pone de relieve que la situación de las islas no puede calificarse de urgencia, sino de «emergencia empresarial y social», sobre todo en sectores como la hostelería, el comercio o el transporte, por citar algunos ejemplos. Por ello, y pese a reconocer que el Estado ha impulsado muchas ayudas, se reivindica un esfuerzo adicional con incentivos directos a empresas y autónomos para evitar un ciclo de «insolvencias en cascada». En este apartado se subraya igualmente la necesidad de activar el régimen especial de las islas (REB).
Reparto de fondos europeos
Respecto a la transformación económica poscovid-19, se considera que en el reparto de fondos europeos se deberían de tener en cuenta las diferencias en el desplome económico sufrido por cada comunidad autónoma, y se recuerda que el archipiélago ha sido la zona de España que más lo ha sufrido.
La carta remitida al presidente Pedro Sánchez concluye señalando que «los desafíos a los que nos enfrentamos en Baleares son reales. Son muy graves y son muchos. No los superaremos fácilmente, ni en poco tiempo, pero los residentes de las islas deben saber que les haremos frente todos juntos: Gobierno autonómico y partidos con representación en el Parlament balear, Consells Insulars, municipios y sociedad civil. Baleares ha sido vital y debe seguir siéndolo para la economía española. Es una carrera contra el tiempo, actuar juntos y coordinados nos ayudará a proteger más vidas, a reactivar la economía y a recuperar la senda del bienestar».
El documento se complementa exponiendo datos sobre la dureza con que la pandemia ha golpeado a la economía de las islas, con una caída que se mueve entre el 27% y el 31% según las diferentes estimaciones, lo que supone prácticamente triplicar la del conjunto de España, de un 12%, y ello pese a admitir que los ERTE y los créditos ICO han mitigado el descalabro.
Firmantes del documento
La carta la firman el presidente del Cercle de Mallorca, José María Vicens; el rector de la UIB, Llorenç Huguet; los presidentes de las patronales CAEB y PIMEM, Carmen Planas y Jordi Mora respectivamente; el secretario general de UGT en las islas, Alejandro Texías; el vicepresidente de la Cámara de Comercio de Mallorca, Josep Lluís Aguilo; la decana del colegio de arquitectos, Marta Vall-llosera; el vicedecano del colegio de abogados, Rafael Gil; y el presidente del colegio de economistas, Onofre Martorell.
Tras la entrega de este documento, todos los asistentes pusieron en valor que la sociedad balear se presente unida para solicitar ayudas, incluida la propia delegada del Gobierno. Además, se insistió en que lo que se reclama para las islas se justifica por ser la zona con una economía y un mercado laboral más «enfermos» a causa del coronavirus.
