La píldora que evita los contagios por VIH antes de mantener relaciones sexuales no está aún a disposición de los colectivos de riesgo de Balears, que es una de las cuatro CC AA del país junto a Asturias, Canarias y Castilla-La Mancha que aún no la ha incluido en su cartera de servicios pese a que el Sistema Nacional de Salud (SNS) decidió hacerlo en noviembre de 2019, hace ahora casi dieciséis meses.

Desde la dirección general de Prestaciones y Farmacia de la conselleria de Salud no concretaron cuándo podría empezar a dispensarse de forma gratuita este fármaco ni a qué colectivos se les suministraría. Se limitaron a confirmar unos hechos ya conocidos. A saber, que en Mallorca y en Eivissa se dispensarán en los centros de diagnóstico, tratamiento y prevención de infecciones de transmisión sexual (CAITS) mientras que en Menorca, isla que carece de una consulta específica similar, se suministrará a los colectivos de riesgo en la farmacia hospitalaria del Mateu Orfila.

No obstante la Associació de Lluita Antisida de les Illes Balears (ALAS), a través de su coordinador Joan Viver, que mantiene reuniones periódicas con la dirección general de Prestaciones, señaló que su dispensación previsiblemente comenzará en el mes de abril. «Hay gente que ya la está tomando y gente que está pendiente de que se la prescriban de manera oficial», reveló Viver.

Que haya gente que ya la esté tomando supone que el fármaco se está comprando a través de internet y sus usuarios se están sustrayendo al necesario control médico que precisa su ingesta. Y es que una toma continuada de estos fármacos puede provocar daños renales que deben ser evaluados por un médico.

Los candidatos a recibir esta medicación son hombres que tengan sexo con hombres y transexuales mayores de 18 años que no tengan ya el VIH, ya que el fármaco haría más resistente al virus. Además, habrán de cumplir al menos 2 de los siguientes 5 criterios: Tener más de diez parejas sexuales en el último año; haber realizado al menos una práctica sexual de riesgo en ese mismo periodo; haber consumido drogas en una relación de riesgo; o haber recibido profilaxis postexposición o desarrollado una infección sexual bacteriana en los últimos 12 meses, detallaron en la dirección general de Prestaciones cuando parecía inminente la financiación pública de este fármaco, a finales de octubre de 2019.

Casi 17.000 euros al año

En esos momentos su titular, Nacho García, estimó que inicialmente el fármaco podría ser prescrito a unas cincuenta personas en Balears. Como el coste de un tratamiento mensual ascendería a unos 28 euros (336 euros anuales), subvencionar el tratamiento a los citados 50 beneficiarios costaría casi 17.000 euros anuales. Desde ALAS estimaron que habrá más de 50 posibles beneficiarios.