La conselleria de Medio Ambiente ha puesto en marcha la remodelación y ampliación de las estaciones de aforo para vigilar el caudal de los torrentes de Balears. El proyecto, que cuenta con una inversión de 1,2 millones de euros, contempla la instalación de 21 nuevas estaciones que, unidas a las 20 ya existentes permitirá conocer a tiempo real el nivel de agua que transportan 41 cauces de las torrenteras más peligrosas de las islas, 32 de Mallorca.
El conseller de Medio Ambiente, Miquel Mir, explicó ayer que estas estaciones no servirán para prever riadas como la de Sant Llorenç, pero sí que permitirán poner en alerta cuando uno de los torrentes incrementa su caudal a niveles peligrosos y podría desbordarse. «Lo de Sant Llorenç no hay nada que lo pueda predecir, ya que en 15 minutos ocurrió todo», aseveró el titular de Medio Ambiente del Govern.
Mir destacó que el proyecto permitirá renovar y modernizar una red de estaciones de aforo que lleva obsoleta casi una década. «En definitiva, nos permitirá mejorar la fiabilidad de los datos que aportan estas estaciones de aforo y permitir mejorar el conocimiento de los caudales infiltrados a los acuíferos». «Así, cumplimos las prescripciones del Plan Hidrológico de las Illes Balears», añadió.
Mir visitó ayer la estación de aforo del torrente de sa Riera, en el término municipal de Palma en dirección a Puigpunyent, junto a la directora general de Recursos Hídricos, Joana María Garau. Allí se pudo comprobar de qué forma medirán los caudales de los torrentes mediante una sonda que trasmitirá los datos directamente a las oficinas de la conselleria de Medio Ambiente.
La instalación de las estaciones de aforo consiste en acondicionar los accesos y el lecho del torrente, así como en reparar la solera existente. Se ha protegido el lecho del torrente «con un rompeolas engravado» de hormigón para que el agua vaya hacia un pequeño pozo donde está la sonda medidora. Se ha construido una pequeña caseta sobre el pozo, en la cual se ha instalado un panel solar con la finalidad de que genere energía para trasmitir los datos de los caudales, según detallaron los técnicos de Medio Ambiente. Finalmente, se instala la sonda sumergible de nivel que medirá y transmitirá los datos de caudal y crecidas del torrente.
El proyecto de las nuevas estaciones medidoras de caudal está financiado con fondos de la Ecotasa y se prevé que en pocos meses la gran mayoría ya estén en pleno funcionamiento y aportando datos a Recursos Hídricos.
Los torrentes a vigilar
Hasta el momento había 20 estaciones medidoras, todas ellas en Mallorca, que fueron instaladas hace más de 20 años con tecnología analógica y que no transmitían ningún dato, solo lo almacenaban y un operario recogía las mediciones una a una. Todas ellas serán desmotadas y modernizadas. En el caso de Mallorca se contará con 32 estaciones de aforo y algunos torrentes, los más importantes y que discurren por varios términos municipales, contarán con dos puntos de medición del caudal de agua.
Por ello, los torrentes que serán vigilados a tiempo real por la conselleria de Medio Ambiente en Mallorca son: el Torrent Gros, sa Riera, Sant Miquel, na Borges, Aumedrà, Coa Negre, l’Ofre, Canyamel, ses Sitges, Torrent Major, ses Planes (Sant Llorenç), el de Sant Jordi, Fornalutx, Biniarraix, Lladonera, Son Real, Son Bauló, Comofreda, Massanella, Sollerich, Almedrà, Pina, ses Font Ufanes, Sont Catlar, el de Santa Ponça, sa Síquia, Torrent de na Bàrbara, Des Gore Paguera, ca n’Amer y el de Aumedrà.
Las estaciones de medición están ubicadas básicamente en la comarca del Llevant, debido a la peligrosidad y el riesgo de inundación. Asimismo, Palma, sus localidades limítrofes y la Serra de Tramuntana albergarán más del 50% de ellas.
