La juez decana de Palma lamenta la imagen de los funcionarios denunciados

Informará del incidente al Ministerio de Justicia

Sonia Vidal, la juez decana de Palma, lamentó este mediodía la mala imagen y la falta de sensibilidad y responsabilidad mostrada por los tres funcionarios judiciales, que el pasado viernes fueron sorprendidos de fiesta en un bar de la calle Parellades, a escasos metros del edificio judicial. Vidal realizó estas primeras manifestaciones después de haber tenido conocimiento del atestado realizado por la Policía Local de Palma, que se refiere a unos hechos ocurridos en la noche del pasado viernes. La Policía tuvo conocimiento de que en el interior de un bar, que debía estar cerrado como consecuencia del estado de alarma, se estaba celebrando una fiesta ilegal. Dentro del establecimiento, además del dueño, se encontraban seis personas y tres de ellas dijeron que eran funcionarios judiciales. Uno de ellos, según la versión policial, mantuvo una actitud desafiante con los agentes.

La juez decana reiteró que este incidente se produjo a una hora en la que los funcionarios judiciales no estaban en horario laboral. Por esta razón consideró que la responsabilidad de la Administración de Justicia era “mínima”, por cuanto los funcionarios estaban actuando en su ámbito privado y bajo su responsabilidad personal.

Aún así, consideró que “es innegable la mala imagen y falta de sensibilidad y responsabilidad que evidencian los hechos”. A pesar de ello, Sonia Vidal dejó claro que el decanato no puede adoptar ninguna medida disciplinaria, entre otras cosas porque no tienen competencias sobre esta materia. La jueza decana de Palma se limitará a dar cuenta de lo ocurrido al Ministerio de Justicia, por la condición de funcionarios de los trabajadores que fueron sorprendidos en el bar, por si se considera que se debe adoptar algún tipo de medidas disciplinarias. Desde su competencia como juez decana de Palma, la magistrada insistió en que ella no puede adoptar ningún tipo de medida disciplinaria, dado que en el momento que los funcionarios judiciales fueron sorprendidos de fiesta en el bar no se encontraban trabajando, sino fuera de su horario laboral.

Tracking Pixel Contents