La manifestación contra las restricciones del Govern prevista para el viernes será motorizada. La Delegación del Gobierno en Balears ha prohibido expresamente a los promotores la celebración de la marcha a pie, por lo que los manifestantes tendrán que ir en su vehículo particular.

«Nos han ofrecido hacer nuestra manifestación, pero a su manera, con todo el mundo montando en sus vehículos porque es la única manera de que sea autorizada», dijo resignado Víctor Sánchez, uno de los promotores de la protesta. En todo caso, este restaurador anticipó que se unirán peatones. «Con toda seguridad habrá mucha gente que no podrá venir en su vehículo. Supongo que habrá una gran masa social a pie, y de estas personas nosotros no podemos responsabilizarnos como plataforma. Atenderemos al itinerario que nos marquen, pero todo lo que pase fuera de ese recorrido no será nuestra responsabilidad», afirmó Sánchez.

La Delegación del Gobierno todavía no ha autorizado formalmente la protesta, pero le dará vía libre si se celebra en un formato similar al de otras marchas motorizadas que ya se han celebrado en la isla. Hay que recordar que el departamento que dirige Aina Calvo prohibió la manifestación que los restauradores celebraron la pasada semana, pese a lo cual cerca de cuatro mil personas recorrieron varias calles de Palma. 

La protesta se saldó con multas que suman 124.000 euros para siete implicados en diversos altercados con la policía. El propio Sánchez ha sido multado con 600 euros en calidad de promotor.

Precisamente la Delegación del Gobierno ha autorizado una marcha motorizada a favor de la hostelería hoy en Eivissa. 

Está previsto que el viernes la caravana de vehículos saldrá del Parc de la Mar, subirá por Vía Argentina, seguirá por el Paseo Mallorca y recorrerá las Avenidas hasta terminar de nuevo en el paseo Marítimo y terminar frente al Consolat. 

Hasta el momento solo ha expresado su respaldo a la protesta la extrema derecha después de que Vox y Foro Baleares anunciaran el martes su participación. En cambio, las patronales de restauración le ha dado la espalda.

Por su parte, el coordinador autonómico de Salud Mental, Oriol Lafau, indicó ayer que hay manifestaciones «más potentes» que las que provocan aglomeraciones y suponen un riesgo sanitario. Este experto dijo entender que «la sociedad se sienta frustrada y cansada», pero sugirió trasladar las protestas a las redes sociales al poder conseguir un gran impacto.

La Resistencia balear

Los organizadores de la protesta presentaron la plataforma Resistencia balear. «En el Govern han hecho de la política un negocio muy lucrativo a costa de nuestro esfuerzo, pero les dejaremos claro que se ha acabado vivir como esclavos», indicó Ángel Galeote.