Con la primera jornada de bares, restaurantes y grandes comercios con la barrera bajada —excepto para los pedidos para llevar (hasta las 22 horas) o con entrega a domicilio (hasta las 24 horas) — vuelve el panorama de semiconfinamiento a Mallorca, con los ciudadanos sentados en los bancos de las calles tomando café. Sin embargo, el Govern da luz verde a otros establecimientos de considerables dimensiones, como los concesionarios de venta de vehículos o los centros de jardinería, que pueden seguir abiertos con un aforo del 30%.
El Consolat de Mar es más laxo con parte de los grandes comercios, pues aunque está prohibida la apertura de los que dispongan de más de 700 metros, se exceptúa, junto a los de productos de primera necesidad, a los dedicados a telecomunicaciones, servicios de peluquería y estética y centros de veterinaria y jardinería y a la venta, mantenimiento y reparación de vehículos de motor que podrán abrir con una reducción de la capacidad de su aforo del 30%. Y en los que superen esa superficie, se permite acceder para recoger encargos. Su horario es hasta las 20 horas.
Hoy se conocerán las ayudas para el sector de la restauración, tras la sonada protesta ilegal que protagonizaron el martes. Mientras, la patronal de pequeño y mediano comercio, Pimeco, se suma a las reivindicaciones y reclama al Ejecutivo Armengol subvenciones ante «los efectos devastadores» de la pandemia, por un mínimo de 100 millones de euros. También exigen que la campaña de vacunación sea las 24 horas los siete días de la semana» para no perder la próxima temporada turística.
Por otro lado, el Govern aconseja que las visitas a los establecimientos comerciales se hagan de forma individual o un máximo de dos personas del mismo núcleo de convivencia, a excepción de las personas con niños a su cargo, personas con discapacidad o dependientes.
Está prohibido el consumo de alimentos y bebidas en todos los establecimientos o espacios cerrados abiertos al público y en todos los vehículos y ferrocarriles públicos.
También se recomienda a todos los mallorquines recogerse en su domicilio no más tarde de las 20.00 horas a pesar del toque de queda hasta las diez de la noche.