El Govern descartó ayer pedir ayuda al Ejército para acelerar el ritmo de vacunación contra la pandemia de la covid-19, tal y como habían pedido desde diferentes sectores empresariales para asegurar una incidencia menor en la próxima temporada turística. 

Pilar Costa, portavoz del Ejecutivo, indicó tras el Consell de Govern que el ritmo de vacunación es el adecuado y no hace falta más personal. Por ello, descartó por completo la llegada de enfermeros militares en las islas. «El ritmo de vacunación es el que se había planificado desde el principio», aseveró Costa. La también consellera de presidencia negó que exista un problema de falta de personal o de infraestructura para poner las vacunas.

En concreto, Costa explicó que ya se han inyectado 6.420 dosis de las 12.840 que estaban disponibles. En este sentido apuntó que se ha llegado ya al 80% de las vacunas disponibles en estos momentos en Balears.

Por otra parte, la conselleria de Salud tiene previsto empezar la vacunación de los profesionales sanitarios a partir de mañana miércoles. Lo más probable es que se inicie esta fase en el hospital de Son Espases, una vez se ha culminado el proceso en las residencias geriátricas.

 En el caso de los profesionales sanitarios, se utilizarán todas las dosis de que se dispongan, sin reserva para la segunda dosis como se ha hecho hasta ahora, ya que el Govern ya tiene «garantizado que irán llegando» vacunas de los laboratorios autorizados por la Unión Europea, Pfizer y Moderna.

Asimismo, la portavoz del Govern indicó que ayer noche estaba previsto que llegaran cerca de 6.000 dosis más, si la borrasca Filomena no lo impedía por el estado de los aeropuertos.

En cuanto a los militares, Costa recordó que Balears fue de las primeras comunidades en solicitar la ayuda del Ejército para el rastreo de positivos y agradeció la llegada a las islas de 130 rastreadores. No obstante, insistió que el Servicio de Salud cuenta con el personal suficiente para administrar las vacunas.