El portavoz del comité de enfermedades infecciosas, Javier Arranz, no ha descartado un próximo cierre perimetral de Palma aunque si bien ha matizado que debería hacerse muy bien dada la dificultad que entraña que esta medida sea efectiva en municipios grandes como el palmesano con un gran volumen de circulación de personas de municipios vecinos.

Un confinamiento como el vivido al inicio de esta pandemia ha de ser autorizado por el Gobierno central, ha recordado al tiempo que no ha entrado a valorar la posibilidad de un cierre de todos los establecimientos no esenciales.

El comité no propone restricciones, tan solo hace un análisis de la situación epidemiológica, ha diferenciado.