La residencia de Sant Miquel/Oms de Palma abrió el domingo la campaña de vacunación preservando a un total de 165 personas que, ayer se supo, fueron residentes, empleados sociosanitarios y... los propios sanitarios que acudieron a dosificar los fármacos a la residencia de ancianos. Carlos Villafáfila, subdirector de enfermería y cuidados asistenciales del Servei de Salut y coordinador de la campaña de vacunación contra la covid-19, reveló que el pasado domingo se tuvo que vacunar en la residencia de Sant Miquel a unas personas a las que no estaba inicialmente previsto hacerlo, para evitar que se desperdiciaran algunas dosis contra el coronavisrus «Se había citado a profesionales que atienden a la residencia que finalmente no se presentaron, por lo que tuvimos que vacunar a los sanitarios que acudieron al centro para evitar que se malograran algunas de las dosis recibidas», explicó el responsable de la campaña recordando que pese a que a este colectivo (los sanitarios que acudan a vacunar a las residencias) se le ha dado prioridad para vacunarse, el pasado domingo no estaba previsto hacerlo. Cabe recordar que fue el domingo, sobre las 17 horas, cuando la residente Avelina Serrano, de 94 años, y la coordinadora de Enfermería de la residencia Oms-Sant Miquel, María Cutillas, recibieron las primeras dosis del fármaco Pfizer, convirtiéndose de esta manera en las primeras pacientes en recibirlo en Balears.