Las bajas temperaturas, que esta noche se mantienen en descenso, y el frente tormentoso que atraviesa Mallorca, acompañado de vientos del oeste, ha provocado esta noche una granizada sobre la ciudad de Palma, la primera de este invierno, que durante unos minutos ha teñido las calles y los coches aparcados de blanco.
La situación durante esta noche y la madrugada sigue siendo favorable a que se produzcan chubascos dispersos con granizo y alguna tormenta, mientras la cota de nieve en la Serra de Tramuntana se mantiene a unos mil metros, según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología en Baleares (Aemet).
El miércoles se esperan intervalos nubosos con probabilidad de alguna precipitación ocasional que de madrugada podría ir acompañada de granizo pequeño. La cota de nieve subirá de 800 metros a 1100. Las temperaturas se mantendrán en descenso y el viento soplará del noroeste con algún intervalo de fuerte y rachas de 60 a 70 km/h en Mallorca.
