La presidenta del Govern, Francina Armengol, reconoció que el endurecimiento de medidas derivadas del repunte de casos por el puente de la Constitución, como las reuniones máximas de seis personas , el toque de queda a las diez o el cierre del interior de bares, se mantendrán en Nochevieja y ya dejó caer que las restricciones se alargarán un mes como informó ayer este diario: «Los abrazos y los besos pueden esperar quince días o un mes porque a lo mejor si los avanzamos pueden ser los últimos», pronunció en una entrevista radiofónica en el programa de Àngels Barceló, Hoy por Hoy, en la cadena Ser.

Armengol recordó que «hace dos semanas Balears era la segunda comunidad con mejores cifras y ahora está entre las peores». Según la presidenta, este crecimiento se debe a varios factores: «cansancio y fatiga del covid, la relajación social y el frío». «Los contagios nos vienen sobre todo de los encuentros sociales» hizo hincapié la presidenta.

Al preguntarle por la situación en Nochevieja, la presidenta ha dicho que «se prevé que sigamos en nivel 4», con lo que se mantendrán las restricciones.

La presidenta señaló que no puede «prohibir a nadie que vuelva a su casa», y recordó que a partir del 20 de diciembre se pedirán PCR negativas para entrar en las islas y «hemos concertado con centros en toda España para que los residentes tengan esa prueba gratuita». 

«Estas Navidades no serán las mismas», lamentó. Sin embargo, es optimista y cree que «las que vienen serán mejores». En esta línea pronosticó que «en pocas semanas tendremos la vacuna y empezaremos a vacunar a los colectivos vulnerables».