La directora general de Innovación del Govern balear, la ibicenca Núria Riera, negó ayer que esté percibiendo indebidamente el sobresueldo de 22.000 euros anuales que paga la Comunitat Autònoma a todos sus altos cargos que proceden de las Pitiüses y de Menorca y no cuentan con domicilio en Mallorca, pese a que Riera dispone de un piso en propiedad en Palma, que ahora tiene alquilado.

La directora general explicó ayer a Diario de Ibiza que la propia Oficina Anticorrupción del Govern (que realizó un informe revelando esta situación) ha emitido ahora otro escrito asegurando que no se ha producido ninguna irregularidad. «Tengo un informe de la Oficina Anticorrupción que dice que no he cometido ninguna ilegalidad», afirmó Riera, quien lamentó que el presidente de dicho organismo autonómico, Jaume Far, ahora «saca que esto ha de ir a la Comisión de Ética, porque no encuentra que sea ético».

Núria Riera deploró que se filtrara a la prensa el informe donde se detectaba lo que Anticorrupción considera un comportamiento irregular. «Se filtró este informe confidencial a la prensa intencionadamente. Cada vez que ahora hay un movimiento en la Comisión de Ética lo sabe antes la prensa que yo», añadió.

El nuevo escrito al que alude Riera (cuyo abogado no quiso facilitar copia ni detallar su contenido) respaldaría las explicaciones que ya ha dado la directora general con anterioridad: «Dice que he demostrado mi residencia efectiva en la isla de Eivissa desde hace muchos años y que, cuando volví de mi último trabajo en la República Dominicana, pedí cita para empadronarme [en Eivissa], pero, como sabemos los ibicencos, no te la dan el mismo día, sino tres meses después. Y el 9 de junio me empadroné», es decir, antes de que fuera nombrada por el vicepresidente Juan Pedro Yllanes, de Podemos, en su cargo del Govern. «Un mes después me ofrecen este trabajo», recalcó.

Riera se definió a sí misma como «una tecnócrata», puesto que ha trabajado «con diferentes cargos públicos a raíz de mi trayectoria profesional», recordó, y ello «es independiente de mis preferencias políticas». «No he estado ni estaré afiliada nunca a ningún partido político», aclaró, si bien se declaró «profundamente de izquierdas», y .

Si estuvo empadronada anteriormente en Palma fue por un tratamiento médico que la obligó a constantes estancias en el hospital de Mallorca, añadió.

Dimisión

Los partidos de la oposición en el Parlament balear (PP, Ciudadanos y Vox) han solicitado reiteradamente la dimisión o el cese de Núria Riera, ante lo que consideran un cobro indebido de este plus de 22.000 euros. El PP ha pedido a la directora general que devuelva el importe percibido hasta ahora, es decir, unos 25.000 euros, mientras que Ciudadanos afirma que «se han incumplido los requisitos que marca la ley de presupuestos para el cobro de esta indemnización por doble residencia».

La vivienda que tiene Riera en Palma, recordaron estos partidos, le permitiría residir en dicha ciudad cuando se desplaza a ella y, además, le genera unas rentas adicionales al tenerla actualmente alquilada.