La Federación de Asociaciones de Familias de Alumnos de Mallorca (Fapa) exige que todos los alumnos puedan volver a las aulas de manera presencial, en especial los de segundo de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y los de segundo de Bachillerato.

Según explicó la organización en un comunicado, estos dos niveles educativos son los que más pueden sufrir las consecuencias «negativas» de no asistir a clase.

Los alumnos de último curso de Bachillerato deben enfrentarse a las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU), mientras que los estudiantes de segundo de la ESO ya tuvieron que realizar la mitad del primer curso confinados. Además, la federación asegura que existe una «falta de igualdad» entre el alumnado que asiste a centros con clases presenciales y el que recibe la educación de forma semipresencial.

En este sentido, los padres han asegurado que «entienden» la necesidad de reducir el número de alumnos por clase, pero señalaron que a todas las familias les preocupa como están afectando estas medidas a sus hijos.

Fapa informó que el pasado jueves se reunió el jueves con el director general de Planificación, Ordenación y Centros, Antonio Morante, y con el jefe de Inspección Educativa, Antoni Arbós, a los que transmitió «la necesidad» de recuperar toda la presencialidad posible. La Conselleria ha explicado las próximas iniciativas para recuperar presencialidad en segundo de la ESO y en segundo de Bachillerato, ligadas a la evolución de los indicadores sanitarios de la pandemia.