El Consell de Mallorca comprará medidores de dióxido de carbono (CO2) para las 280 asociaciones y entidades de gente mayor en la isla, una medida que llega tras meses de inactividad debido a la pandemia del coronavirus. Con estos aparatos se medirá la concentración de CO2 en las sedes sociales y en espacios cerrados de los clubes para facilitar el control del grado de ventilación y la calidad del aire, a fin de saber cuándo se debe ventilar y reducir el riesgo de contagio, afirmó el Consell de Mallorca en una nota. La consellera de Presidencia de la entidad insular, Teresa Suárez, explicó ayer que, una vez aprobado Plan de medidas excepcionales de prevención y contención, los clubes y asociaciones de personas mayores de Mallorca podrán retomar la actividad.