El Govern trabaja con el foco puesto en el mantenimiento de las restricciones en el próximo puente de la Constitución y la Navidad, según dejó ayer claro la consellera de Salud, Patricia Gómez. Recordó que el alcance de las medidas para esas fechas festivas se decidirá en la reunión prevista entre las comunidades autónomas y el Gobierno central para coordinarlas y en el caso de Balears la intención del Govern es que las restricciones se alarguen hasta las fiestas de Sant Sebastià y Sant Antoni, las celebraciones populares más multitudinarias del año en el mes de enero.
La postura del Govern, que defenderá en la reunión con el Gobierno central, es la de mantener restricciones estrictas ante el puente de la Constitución y las navidades, incluidas la distancia social, y apostar por aprovechar los espacios exteriores evitando las concentraciones de personas, si bien no quiso concretar el número máximo que podría reunirse. «A mediados de enero puede haber un repunte si no mantenemos medidas bastante estrictas y debemos evitarlo, ya que además coincide con la llegada de la gripe a Balears», dijo Gómez, quien precisó que las medidas concretas serán «proporcionales» a la situación de la pandemia que es cambiante.
La consellera tampoco quiso concretar cuál será la propuesta desde las islas en cuestiones como la movilidad entre comunidades. «Tenemos que esperar a ver», se limitó a comentar al ser preguntada por esta cuestión. «Esperamos una respuesta coordinada y poder extremar las medidas de seguridad», añadió Gómez, quien precisó que no hay ninguna novedad respecto a la posibilidad de que se exijan también pruebas PCR a los viajeros nacionales que lleguen a Balears, algo que la presidenta Francina Armengol se mostró el martes «convencida» de que el Govern lo conseguiría. Las PCR obligatorias para turistas internacionales de países con alta incidencia de coronavirus empezarán a realizarse el próximo día 23 y Gómez precisó que el Govern estará atento a que funcione correctamente.
La consellera defendió que las medidas adoptadas en Balears «están funcionando» con una mejora de la incidencia de la pandemia en general, salvo en Menorca, donde han subido los contagios. No obstante, con el fin de mantener el control de la situación y evitar rebrotes, anunció la prórroga de las restricciones generales en las islas cuya resolución firmó ayer. Así, se mantiene el toque de queda desde la medianoche a las 6 horas o la limitación de actividad de la restauración. La consellera resaltó que si bien la incidencia general del coronavirus en las islas se está estabilizando e incluso descendiendo, todavía continúa en niveles altos, con 232 casos positivos por cada 100.000 habitantes.
En cuanto a la obligación de los clientes que consuman en el interior de un restaurante o bar de identificarse y constar en un registro que el establecimiento deberá mantener a disposición de la conselleria de Salud al menos durante 30 días, Gómez defendió que el objetivo de esta medida es «poder contactar lo antes posible» si se produce un caso de coronavirus con aquellos clientes que hubieran tenido «contacto» con él.
Respecto a la llegada de la vacuna contra el coronavirus, precisó que en enero habría dos vacunas con autorización para comenzar a suministrarse. El Govern prevé vacunar primero a los usuarios de residencias y a los sanitarios.
Por otro lado, la conselleria de Salud anunció ayer que prevé que, a partir del próximo sábado 28 de noviembre se pueda retomar la actividad de atracciones y locales de ocio infantil con determinadas condiciones, que ya han sido trasladadas a los sectores afectados, como aforos limitados o medidas de higiene y distancia. Entre ellas, en cuanto a las atracciones infantiles o de feria no podrá haber más de tres atracciones habilitadas en el mismo lugar. En cuanto a los locales de ocio infantil, la actividad se desarrollará según otras condiciones diferentes por islas. Así, en el caso de Mallorca habrá un 50% de la capacidad máxima autorizada del espacio y grupos de un máximo de 10 personas.
Flexibilizan las visitas a usuarios de residencias con covid
La resolución de ayer por la que se prorrogan las restricciones generales en las islas incluye como novedad una flexibilización en lo que se refiere a las visitas a usuarios de residencias de personas mayores, que se permitirán en los centros donde haya presencia de contagios o sospechosos de coronavirus. Para ello, los centros deberán tener activado correctamente el plan de contingencia que garantice que la residencia tenga una adecuada sectorización, así como todas las medidas de seguridad y garantizar que las visitas cuentan con un acceso y salida independientes y sin ningún contacto con unidades en las que haya un brote de coronavirus.
