El Consell de Mallorca presentó ayer los presupuestos de la institución insular para el año que viene, que ascienden a 494 millones de euros, 12 millones más que este año. El 50% del presupuesto (247 millones) se destinará a políticas sociales, el más elevado de la historia, y contempla endeudarse en 22 millones ante la bajada de financiación del Govern a raíz de la covid-19.

La presidenta del Consell, Catalina Cladera, presentó las cuentas junto con el conseller de Hacienda, Pep Lluís Colom, justo después de haberse aprobado por parte del equipo de gobierno. La presidenta explicó que gran parte de los ingresos del Consell proceden de la comunidad autónoma, con 285,3 millones, de modo que la cifra de aportación del Govern el año que viene bajará en 28 millones (por el descenso de la liquidación de financiación de 2019 y tributos cedidos), que el Consell compensará parcialmente por medio del endeudamiento. Cladera habló de que el objetivo «es crear un escudo social y económico contra la pandemia», ya que también se destinarán 124 millones a políticas económicas y 42 a ambientales. De igual modo, se crea un fondo de reactivación covid con 20 millones de euros. Con todo, el Consell podría llegar a gestionar 520 millones en 2021 gracias al desbloqueo de remanentes y flexibilización de reglas fiscales,

Por áreas, el presupuesto del Institut Mallorquí d’Afers Socials (IMAS) será de 222,7 millones; Movilidad e Infraestructuras contará con 99,2 millones; Hacienda y Función Pública con 57 millones; Promoción Económica y Desarrollo Local con 33 millones; Cultura y Patrimonio con 25,8 millones; Presidencia dispondrá de 18,9 millones; el departamento de Turismo y Deportes de 16,6 millones; Sostenibilidad 11,2 millones y Territorio 9,4 millones.