El cangrejo azul (Callinectes sapidus) es una especie muy voraz; el aumento exponencial de su población en aguas de Mallorca ha generado cierta preocupación ambiental. Una manera de reducir su presencia es a través de la pesca recreativa debido al interés gastronómico del producto. Así, a partir del 1 de diciembre se podrán solicitar las autorizaciones para su captura en once zonas de la isla. En Pollença se podrá pescar en la Gola y en el Torrent de Sant Jordi, en Alcúdia en s’Estany Gran y en Muro en la Gola de s’Albufera. En la zona de Santa Margalida, la pesca recreativa del cangrejo azul estará autorizada en s’Estany de Son Bauló, en el torrent des Revellar y en el de na Borges, además del de Canyamel en Capdepera, en el Riuet del Port de Manacor, en Cala Pi y en ses Fontanelles.
«El cangrejo azul es una especie muy voraz que ocasiona problemas en las zonas húmedas de las islas», razona Mas
La conselleria de Medio Ambiente y el Consell de Mallorca han establecido las condiciones para acceder a la autorización de la pesca del cangrejo azul. El director general de Espacios Naturales y Biodiversidad, Llorenç Mas, ha dejado claro que su captura está totalmente prohibida en espacios protegidos pero esta pescar recreativa en las zonas establecidas permitirá poder ejercer un control sobre la elevada incidencia de esta especie y sus efectos en la biodiversidad del archipiélago. «La idea es contribuir a reducir las densidades de esta especie invasora», determinó Mas, ya que el cangrejo azul es «una especie muy voraz que ocasiona problemas en las zonas húmedas de las islas».
Será el Consell de Mallorca como autoridad competente, la institución encargada de autorizar la pesca recreativa del cangrejo azul. El director insular de Cooperación y Caza, Jaume Tomàs, ha detallado que las solicitudes se podrán presentar a través de la página web del Servei de Caça i Pesca Fluvial o presencialmente a partir del 1 de diciembre. La licencia será para un año y los ejemplares capturados serán para el consumo propio, en ningún caso para la comercialización. Entre los requisitos para su captura, se determina que solo se podrá pescar en caña e hilo, con retel y pinzas como elementos auxiliares para su extracción del agua. Tampoco se podrán alterar las condiciones de la ribera de la zona húmeda señalando por ejemplo las zonas de pesca. Una vez capturados los ejemplares, se deberá presentar al Servei de Caça un resumen de las capturas en un plazo máximo de 30 días después de que finalice la vigencia de la autorización.
El jefe del Servei de Protecció d’Espècies, Iván Ramos, explicó que el cangrejo azul es una especie atlántica con una capacidad elevadísima de colonización. Su presencia en Baleares se detectó hace cinco años y ahora está presente en todas las islas. Aunque se puede encontrar en el ámbito marino, preferentemente habita en aguas interiores, en aguas salobres. «Su crecimiento es exponencial. Aún desconocemos su impacto pero debemos actuar de manera preventiva. Debido a su interés gastronómico, su pesca recreativa es una manera de contribuir a mantener las poblaciones bajas», desgranó Ramos.
