Ciudadanos, ayuntamientos e instituciones mostraron ayer con actos de distinto tipo su repulsa al asesinato machista de Habibe Ismael, la mujer que la pasada semana apareció muerta junto a su pareja en una gasolinera de Peguera (Calvià).
El personal del Institut Balear de la Dona, junto con vecinas y vecinos de la zona donde se encuentra situada la sede del IBDona, llevaron a cabo ayer una concentración y un minuto de silencio para mostrar su rechazo por la que se ha convertido en la segunda muerte por violencia machista en lo que va de año en Balears. La directora del IBDona, Maria Duran, lamentó durante su intervención que en el Estado español «el machismo ha matado más que el terrorismo».
Por su parte, el ayuntamiento de Palma trasladó el pésame a la familia de la víctima y condenó el crimen con la celebración de un minuto de silencio en la plaza de Cort. En el acto participaron el alcalde de Palma, José Hila; la delegada del Gobierno, Aina Calvo, y la consellera de Administraciones Públicas, Isabel Castro, entre otros.
En Calvià, el Consistorio y el Consell de Mallorca se unieron para celebrar un acto de repulsa en el que se guardó un minuto de silencio y se leyeron varios fragmentos de textos facilitados por el departamento de Igualdad. Entre los asistentes se encontraba la presidenta de la institución, Catalina Cladera; el alcalde de la localidad, Alfonso Rodríguez; y la directora insular de Igualdad, Rosa Cursach.
«La violencia que sufrimos las mujeres es sistemática. Ni casos aislados ni perturbados mentales, sino producto lógico de las sociedades machistas», aseguró ayer el Moviment Feminista de Mallorca, que también se concentró en repulsa al crimen machista.
Asimismo, el Govern recordó ayer que se personará como acusación particular en este caso, puesto que así lo hace en todos los casos de muerte o lesiones graves de cariz machista desde el año 2008.
